De la Plaza de San Francisco a París

Un abuelo jiennense, de esos que se sienta junto a la puerta del Sagrario de la Catedral, dijo: “Si nos juntáramos los jubilados con estas echábamos a Rajoy”. Ellas eran las mujeres que secundaron el movimiento Huelga Feminista 8M, la versión jiennense del paro internacional que permitió que se organizaran actos de protesta en Madrid, París, Londres o Berlín, todos con el mismo objetivo, demostrar la máxima “si nosotros paramos, para el mundo”. La clave, no consumir, no estudiar, no trabajar y dejar de lado la tarea de cuidadora que se atribuye a las mujeres. Unas quinientas se sumaron a los actos convocados, que giraron en torno a una concentración en la Plaza de San Francisco, y al recorrido por los alrededores de los piquetes informativos que, al grito de “i abuela luchó, mi madre luchó y aquí estoy ahora luchando yo” llevó la manifestación a las puertas de la Diputación, el Ayuntamiento, el mercado de abastos e, incluso, a tiendas de grandes cadenas y centros comerciales. La concejal de Jaén en Común, María Dolores Nieto, acostumbrada por su veteranía política a las huelgas, dejó claro que estos logros no son habituales. El grupo fue muy activo. Blanca Peña Anguita, una de las participantes, explicó que el de ayer es fruto de un trabajo de dos meses, con partidos, asociaciones, colectivos autogestionados que atrajo, por ejemplo, a muchas estudiantes universitarias. Incluso, había alumnas de intercambio de la Universidad de San Francisco, como Shannon, sorprendida por el seguimiento de la protesta, y eso que su ciudad natal es un referente en la defensa de los derechos civiles en EE UU. También le llamó la atención la escasa presencia policilal y el ambiente festivo. La Huelga Feminista 8M coincidió en el espacio con los paros de dos horas y la marcha convocada por UGT y CC OO, frente a la Diputación, aunque se prolongó durante 24 horas, desde el miércoles hasta ayer.