El yihadista detenido en Palma pasó temporadas en Jabalquinto

Mohamed Harrak estuvo vinculado 5 años al municipio y llegó a empadronarse

22 abr 2016 / 10:00 H.

El día 13 de noviembre de 2015, cuando miembros del Daesh perpetraron la matanza de la sala Bataclán de París y en otros puntos de la capital gala, el supuesto yihadista marroquí Mohamed Harrak, detenido por la Policía Nacional el martes en Palma de Mallorca, estaba en Jabalquinto. ¿Por qué? ¿Que hacía allí este arrestado por planear un atentado terrorista en España y captar a combatientes del Estado Islámico? Lo cierto es que, administrativamente, se encontraba en el municipio del que es vecino. Fue la pasada Navidad cuando se empadronó, tal y como pudo confirmar este periódico, y la última vez que pisó este pueblo jiennense, con poco más de 2.200 habitantes.

La primera vez que lo hizo fue hace aproximadamente cinco años, para acompañar a su novia española, una joven de Jabalquinto con la que mantuvo una relación estable durante un lustro. Gracias a ello pudo empadronarse, y declaró como su domicilio de residencia el de su familia política. Este trámite le permitió sacarse el carné de conducir; de hecho, tiene el permiso para manejar varios tipos de vehículos distintos. De no estar inscrito en un Ayuntamiento, lo hubiera tenido difícil, ya que como extranjero está obligado a acreditar su situación de residencia normal o estancia por estudios en nuestro país de, al menos seis meses. “Cuando le daba por algo, era muy tenaz”, comentan fuentes del entorno de la familia que lo acogió como uno más en Jabalquinto.

En las ocasiones que completaba el trayecto de más de setecientos kilómetros entre la capital balear y el lugar donde nació su expareja era para permanecer un tiempo razonable entre los jabalquinteños. Disfrutaba de estancias de varios meses junto a sus allegados jiennenses, que coincidían con la temporada baja de la hostelería, sector en el que se ganaba la vida. “Trabajaba en un hotel. Comenzó desde abajo y ya tenía gente a su cargo, era muy responsable”, cuenta un vecino. De esta forma conoció a la que fue su compañera sentimental, que, como tantos jiennenses, trabaja, durante varios meses al año, en los hoteles y restaurantes mallorquines. Con ella, como recuerdan, lo vieron en la pasada Nochevieja, en el cotillón. “No bebía alcohol, porque seguía a rajatabla los principios de la religión musulmán, respetaba el ayuno en el Ramadán y comía solo pollo, pero nada más allá de eso, como el que va todos los días a misa”, relatan. Por las calles de Jabalquinto se le veía practicando “running” y nunca tuvo problemas con nadie, como dejan claro.

Algo cambió tras las pasadas fiestas. Para empezar, la relación con la vecina de Jabalquinto terminó. “No fue por nada en especial, aunque ella comentaba que estaba ya harta de que fuera tan religioso. Eso sí, después de que lo dejaran, no la ha vuelto a molestar”, explican. La ruptura sentimental trajo otras novedades en la vida de Mohamed Harrak. El presunto terrorista, que nació en Marruecos hace 26 años y que vive desde los 8 en España, cambió radicalmente de barrio. Mientras estuvo con su novia, compartió vivienda cerca de Santa Ponça, el lugar donde trabaja; posteriormente, se mudó a Son Gotleu, una zona mucho más modesta, con focos de marginalidad, donde se instaló con sus padres. ¿Y qué hacía mientras pasaba sus vacaciones en Jabalquinto? Era muy familiar, apenas salía del círculo de su expareja, aunque sí dejaba el pueblo, según comentaba, para practicar una de sus aficiones, el “Paintball” y el “Airsoft”, una afición que consiste en simular enfrentamientos armados con el uso de pistolas que disparan bolas de pintura. “Creo que iba a Granada en ocasiones para practicar este juego”.

“Nos hemos quedado helados y nos da un poco de miedo, parecía una persona muy normal y es realmente increíble que lo hayan podido detener por ser del Estado Islámico”, comentan en Jabalquinto, donde el alcalde prefiere no hacer declaraciones y la familia de la expareja guarda silencio. “Ella se enteró de todo cuando salí de trabajar, estaba tan tranquila con una amiga tomando café cuando se lo contaron. Ahora se pregunta que con quién convivió”, afirma una amiga del pueblo.

claves

en mengíbar . La pareja del detenido tiene una vivienda en Mengíbar, que él visitó, aunque no era copropietario.

Detención. La Policía Nacional, en colaboración con la Guardia Civil, seguía los pasos de Mohamed Harrak, también en la provincia de Jaén, desde hacía meses.

solo pollo. Como buen musulmán no bebía alcohol ni tampoco consumía carne de cerdo; de hecho, prefería, sobre todo, el pollo. Pero el respeto a este y otros preceptos del Islam, nada hacía pensar que fuera radical, según su entorno.