La ilusión de todos los sueños

La provincia de Jaén se juega en lotería de Navidad una media de 43,83 euros

20 dic 2017 / 09:12 H.

Ni es desvelar ningún secreto, ni una verdad de Perogrullo, pero la lotería de Navidad es la más popular de todas y la que más ilusión colectiva genera. Es tan de bufanda y zambomba como el turrón de almendra y los villancicos. De hecho, el soniquete de los Niños de San Ildefonso, que supieron hacer perfectamente la transición de la peseta al euro, es la letanía de ese rosario de premios que da paso, cada 22 de diciembre, a una Navidad que, como el amanecer del rubicundo Apolo de El Quijote, “por puertas y balcones... a los mortales se mostraba”.

Si alguien piensa que en Jaén no ha tocado nunca el Gordo tiene razón, pero en la provincia, en toda la historia de esta lotería, tocó cuatro veces, según los datos ofrecidos por la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado (Selae). En dos ocasiones el Gordo de Navidad cayó en Linares, en 1918 y 1961. En una ocasión, los municipios agraciados fueron Quesada (2008), Baeza (2012) y Bailén y Huelma, al alimón (2013). Por si sirve de consuelo, como el mal de muchos, hay tres provincias españolas en las que nunca tocó el Gordo de Navidad: Tarragona, Ávila y Zamora. Y en las de Teruel, que existe y tiene buen jamón, y Salamanca, que también tiene buen jamón, dos catedrales y una rana en la fachada plateresca, solo tocó en una única ocasión.

Y para quienes disfrutan con las estadísticas, según la Selae, quizá les interese saber que donde más ha tocado el Gordo en toda su historia es en Madrid, en 77 ocasiones. No es que la banca barra para casa, pero el sorteo de Navidad y la lotería se inventaron en la Villa y Corte de los Milagros. Le sigue a distancia la provincia de Barcelona, donde tocó 40 veces. Obviamente, lo que se juega allí en lotería de Navidad supera muy de largo al resto de provincias españolas. También tienen mucha más población y administraciones de lotería que, por ejemplo, Jaén.

Y hablando del rey de Roma, en 2016, en el Santo Reino se jugaron en el sorteo de Navidad 34,1 millones de euros, lo que coloca a esta provincia en el penúltimo lugar, solo por delante de Huelva, que gastó 14,3 millones de euros. Como cada año, Sevilla y Málaga se colocan a la cabeza del gasto o inversión en décimos de lotería, con 69,7 millones. Son datos de 2016, porque los de 2017 no están cerrados y sería una estimación. Mari Carmen, vendedora de la administración número 1, situada en la calle Arquitecto Berges, 2, de Jaén, toma el pulso a diario: “Este año se está vendiendo más lotería que otros años y no nos han devuelto muchos décimos. En otras ocasiones, por estas fechas nos habían devuelto más, pero este las ventas van mejor. Hay que tener en cuenta que nos metemos en los últimos días y mucha gente espera hasta última hora para comprar lotería”. Las terminaciones de dos cifras que triunfan este año en las administraciones de Jaén son el 17, el 13 y el 15.

Pero la terminación que todos los años es la favorita, según asegura Lidia Rivera, de la administración número 10 del Gran Eje, es el 5. La que más se pide. Este año se riza el rizo con el 155, el número del artículo de la Constitución aplicado al independentismo del “procés”. “No solo está agotada la terminación en 155, sino que la máquina hace semanas que no daba ni el 55, está vendido en toda España”, apostilla Mari Carmen, de la número 1. Por su parte, Alfonso Ruiz Marín, de la administración de loterías número 3, situada en la calle Navas de Tolosa, 14, corrobora que la máxima afluencia de compradores se da estos últimos días: “Esto es algo que se repite todos los años. Mucha gente espera a última hora para comprar un décimo. Creo que sobrarán muy pocos, más o menos rondará como el año pasado. Nos piden las terminaciones típicas, el 13, el 15... Esas son las que más se venden”.

En los más de 200 años de historia desde que se celebró el primer sorteo, cuando las Cortes de Cádiz y la “Pepa”, la terminación en la que más veces ha tocado en el premio Gordo es el 5. Los jugadores se fijan mucho en la terminación del décimo y los más deseados son los impares. Hay números “feos” que a la gente no les gusta, pero que tienen exactamente las mismas opciones de que toquen que cualquier otro, aunque los cálculos de probabilidades, como los caminos del Señor, son inescrutables. Entre las características de un décimo “bonito” está el que tenga números dispares, que no se repitan, que no sean bajos y que, en su conjunto, no sea un número ni muy alto ni muy bajo, el término medio.

Por otro lado, la venta de décimos “online” se ha disparado en diferentes provincias, pero no en la de Jaén, que justamente se sitúa a la cola de Andalucía en este tipo de adquisición de décimos. La ventaja de la compra “online” es que se puede elegir el número que se desee, siempre que no se hayan vendido todas las series. Los jiennenses prefieren comprar en persona, mirando a la cara, los décimos de Navidad. El trato humano en ventanilla, con el camarero del bar o con el vendedor ambulante, no tiene precio. Nada que ver con internet y las compras “online”.

El gasto medio por persona en el sorteo navideño a través de la red se estima en 22,99 euros, un 0,12 por ciento. Para tener cierta perspectiva de lo que significa, por ejemplo, en Málaga, que es donde más se compra “online”, se está en el 4,57 por ciento y un gasto medio de 50 euros. Córdoba y Huelva están ligeramente por encima de Jaén, con un 0,37 y 0,62 por ciento, respectivamente.

CURIOSIDADES. Cada número tiene diez décimos y el importe de cada boleto es de 20 euros. El premio Gordo de la Lotería de Navidad es de 400.000 euros por décimo, o lo que es lo mismo, 20.000 euros por euro jugado. El segundo premio es de 125.000 euros y el tercero de 50.000. También hay dos cuartos premios de 20.000 euros; ocho quintos premios de 6.000, y 1.794 de 100 euros (que se los conoce como la pedrea). Además se premia un buen número de aproximaciones y hay 9.999 devueltas del dinero para los números que acaben en la última cifra del premio Gordo de este sorteo.

Pero, como se suele decir, no es oro todo lo que reluce. Los afortunados que sean agraciados con el Gordo de Navidad, valorado en 400.000 euros por décimo, el premio final que recibirán será de 320.500 euros, ya que 79.500 euros se los quedará Hacienda.

La medida fiscal, que afecta a los premios por cuantías superiores a los 2.500 euros, se aplicó por primera vez en 2013. Este gravamen especial también se aplica a los sorteos de las loterías del Estado, comunidades autónomas, Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), Cruz Roja Española y entidades análogas de carácter europeo, según se recoge en la normativa del Gobierno. El impuesto especial se devenga en el momento en que se cobra el premio, que ya llevará aplicada la retención correspondiente por la Agencia Tributaria. Pero no será necesario volver a incluir dicho recargo en la siguiente declaración de la Renta del agraciado, a no ser que se haya hecho alguna donación del premio a familiares, entonces sí.

Las pedreas (de 100 euros por décimo) están libres de cargas fiscales, pues estas se incluyen en el porcentaje global que se aplica a las loterías. El límite de 2.500 euros en premios se rebajará de forma proporcional cuando el billete de lotería o de la apuesta tuviera un valor de adquisición o juego menor al euro.

Por lo general, en el sorteo de Navidad, la mayoría de quienes juegan tienen la vista puesta en el premio Gordo. Pero si no toca tampoco se acaba el mundo. También se puede ganar mucho dinero con otros premios menores de la lotería de Navidad. Incluso conseguir una aproximación puede sacar a más de uno de un apuro económico. Y como última opción estaría el reintegro, que permite recuperar el precio del billete, que se suele cambiar, en estos casos, por uno del Niño. Lo comido por lo servido. Algo es algo, pues toda la ilusión y los sueños que se han invertido no tienen precio. Un disfrute virtual impagable.

Este año habrá más premios que el anterior. La emisión consta de 170 series de 100.000 números cada una, que en total asciende a 3.400 millones de euros y se reparten en premios el 70 por ciento (el 30 por ciento restante se lo queda Hacienda), que se traducirá en 2.380 millones de euros en premios.