Un sabor algo agridulce inunda Mancha Real

La cofradía del Cristo de la Misericordia, Nuestra Señora de la Salud y San Juan Evangelista abría la Semana Santa de Mancha Real con su salida el Miércoles Santo desde la parroquia de San Juan Evangelista. Esta joven hermandad, que desde que se convirtiera en cofradía en 2012 procesionaba sus tres imágenes titulares en un único trono, realizó su humilde estación de penitencia por segundo año, en dos tronos. Primero el Cristo de la Misericordia, a hombros de sus cofrades, y tras él, Nuestra Señora de la Salud y San Juan Evangelista, portados por costaleros y arropado por más de un centenar de vecinos.

Las inclemencias del tiempo provocaron que antes de la salida dicha cofradía se decidiera acortar su itinerario procesional siendo las calles que recorrerían Plaza de la Constitución, Carnicería, 28 de Febrero, La Cruz, Maestra y regreso a la parroquia de San Juan Evangelista, para evitar que la lluvia pudiera dañar las imágenes.

Sobre las 21:30 horas, la cofradía iniciaba su recorrido desde el templo de San Juan Evangelista bordeando la Plaza de la Constitución para encaminarse hacía la calle Carnicería. Un problema en el trono de Nuestra Señora de la Salud y San Juan Evangelista hizo que los costaleros no pudieran continuar con la marcha, por lo que desde la organización se decidió regresar al templo.

Durante recorrido de vuelta, en el que únicamente tenían que bordear la Plaza de la Constitución, los cantaores Antonio Martínez y Juan María de Dios les entonaron varias saetas, tanto a la imagen del Cristo como a la de la Virgen.

Una vez en la parroquia, la cofradía explicó a los allí presentes cuál era el motivo por el que se había decidido regresar a la iglesia de San Juan Evangelista, que no fue otro que un contratiempo con el paso de la Virgen.