Bomba en un bus alcalaíno
Una imagen que ha dado la vuelta al mundo. El terrorismo islámico causó en la capital de Siria, Damasco, un verdadera carnicería en un autobús que mantenía la rotulación de la compañía alcalaína Contreras, a la que había pertenecido hasta hace unos años.
El ataque, que según los indicios pudo ser ocasionado por un suicida, ha costado la vida a al menos nueve personas y ha dejado una veintena de heridos.
¿Cómo llegó el vehículo hasta allí? Según fuentes de Autocares Contreras, fue transferido, en septiembre de 2008, a la firma de soportes publicitarios de Madrid que opera en el sector de la compra-venta. Bien directamente o a través de otra compañía, el bus acabó en Líbano, donde está matriculado. En el servicio del pasado domingo, los pasajeros eran fieles chiitas que participaban en una peregrinación. La explosión ocurrió cerca de la mezquita Sayyidah Ruqayya, donde se veneran los restos de una bisnieta de Mahoma, en el entorno del conocido mercado Al Hamidiya. El frente Al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, reivindicó los violentos hechos.
Según la agencia SANA, se emplearon cinco kilos de explosivos, detonados en la parte delantera del autobús y las autoridades localizaron un segundo artefacto dentro de un bolso que estaba en el suelo del vehículo. El grupo Hezbollah condenó el atentado. Los chiitas, una confesión habitual e Siria y Líbano —de donde eran los viajeros— son el objetivo de los ataques de diversos grupos de la rama suní de la religión musulmano que se oponen al régimen del presidente Bashar al-Assad.
En el caso concreto del autobús atacado, se trata de un modelo Scania K113 con carrocerías Beulas. Fue adquirido por Contreras en 1989, que lo utilizó durante casi más de dos décadas. Tenía la matrícula G-4463-T y se encontraba en buen estado de conservación. Desde la compañía se lamenta que los compradores no cambiaran la rotulación para su nuevo uso, aunque, en cambio, sí modificaron la parte de la carrocería en la que antes aparecía la Junta de Andalucía. Igualmente se le había hecho algunos cambios al automóvil, por ejemplo en la zona del aire acondicionado o en los maleteros, para adaptarlos a su nueva etapa en tierras de Oriente Medio.
Es habitual que las empresas españolas renueven con frecuencia sus flotas de vehículos, ya que la normativa española es exigente. Los autobuses, en buen estado, se aprovechan en el Tercer Mundo.