Denunciado por acto sexista a Rodríguez

La Fiscalía acusa al empresario de atentar contra su libertad

03 mar 2017 / 10:22 H.

La Fiscalía de Sevilla denuncia al empresario y exvocal de la Cámara de Comercio Manuel Muñoz Medina por los hechos ocurridos el día 20 de diciembre de 2016 en la sede de la Cámara, cuando el empresario se “abalanzó” sobre la coordinadora general de Podemos Andalucía, Teresa Rodríguez, y simuló besarla con el propósito de “pisotear” su dignidad con un acto “de contenido claramente sexista”. En la denuncia elevada a los juzgados de Sevilla, a la que tuvo acceso Europa Press, el Ministerio Público considera que, tal como describe la propia Teresa Rodríguez en un escrito elevado a la Fiscalía, los hechos podrían ser constitutivos de un delito contra la libertad sexual o de atentado a la autoridad. En este sentido, la Fiscalía asevera que “por el designio que se supone perseguido por el denunciado y por las circunstancias concurrentes en el caso, la conducta del empresario podría tener encaje”, asimismo, en el tipo penal del artículo 173.1 del Código Penal, que impone pena de prisión al que infligiere a otra persona un trato degradante, menoscabando “gravemente” su integridad moral. El Ministerio Público relata que los hechos habrían tenido lugar el 20 de diciembre de 2016, cuando Teresa Rodríguez acudió a un acto a la sede oficial de la Cámara de Comercio de Sevilla, al cual “había sido invitada por razón de las responsabilidades públicas que ejercía y que era presidido por la presidenta de la Junta, Susana Díaz”. Sobre las 15:00 horas, y cuando la parlamentaria se disponía a abandonar el lugar tras concluir el acto, el empresario denunciado, “siendo consciente de la función representativa que cumplía Teresa Rodríguez, y en presencia de varias personas más que habían acudido al acto” —en esa ocasión, casi todos eran hombres—, “se abalanzó sobre ella empujándola hasta hacerla retroceder hacia un rincón”. Según recoge la Fiscalía, el empresario “tapó la boca de la mujer con su mano mientras aproximaba su boca a la de ella y besaba su propia mano, la que cubría la boca de ella, en un ademán como si, en realidad, la estuviera besando en los labios, todo ello mientras pegaba su cuerpo contra el de la diputada, haciéndola retroceder hasta la pared, hasta que la parlamentaria pudo desembarazarse y salir del lugar”. El Ministerio Público considera que “el propósito principal que anima al autor es el de pisotear la dignidad de la persona ofendida con un acto sexista”.