Arte y técnica entre las páginas

La búsqueda de la perfección, la armonía y el contraste fueron las bases del trabajo del arquitecto y pintor Alfonso Rodríguez Márquez, que presentó en el Colegio de Arquitectos su libro La mirada del arquitecto, una obra gráfica de gran tamaño que recoge parte de sus trabajos en cartelería, así como sus mejores diseños, muchos de ellos apoyados documentalmente por extractos de prensa de Diario JAÉN, periódico que siguió de cerca su trabajo y su implicación con la provincia.

Sin miedo al folio en blanco y con valentía, Rodríguez hizo realidad su sueño de compartir con los jiennenses este libro en el que los detalles se convierten en el hilo conductor de su argumento. Así vivió el arquitecto una velada rodeado de muchos de sus compañeros, amigos y familiares. “Esta es una responsabilidad muy grande. Resumo muchos años en un libro con una labor de recopilación documental y experimental grande. Es una obra gráfica dividida en tres partes que habla de Jaén, Cádiz y Sevilla. La sensibilidad es importante para este tipo de oficio, comentó el autor, en cuyo trabajo recoge, además, carteles del V centenario de la santa capilla de San Andrés, además de imágenes realizadas para el Cristo de la Buena Muerte, en el domina el dibujo decorativo e iluminado por un rayo de sol.

Rodríguez se mostró en todo momento agradecido por las personas que estuvieron con él y las que, como él dice, le “aguantan” cada día, y se emocionó al recordar a su padre. A su lado, en esta presentación, estuvieron también el decano del Colegio de Arquitectos, Pedro Cámara, y el director de la Academia de las Bellas Artes de Granada.

Jesús María García Calderón, quien ofreció una charla titulada La ciudad histórica documentada como un logos sumergido, añadió: “La ciudad es un yacimiento vertical, un espacio en el que el arquitecto, si mira adecuadamente, encontrará aquellos paisajes que pueden ser recuperables para ser disfrutados por los ciudadanos. España tiene miedo a la reconstrucción. Es importante ver, en esa recuperación, una historia lograda a través de la armonía y el equilibro”. García, además, mostró algunas imágenes de ejemplo de entornos granadinos, como la Alhambra. “Las labores de reconstrucción deben partir de la documentación, tarea en la que arquitectos, periodistas, fotógrafos, escritores y artistas juegan un papel fundamental”, afirmó.

Por su parte, el decano del Colegio de Arquitectos demostró su orgullo por el trabajo de Rodríguez y destacó: “A raíz de que Alfonso cumple 25 años de profesión, se presenta un proceso de reflexión importante en su actividad como arquitecto. Esta profesión tiene dos patas. Una de la que depende la seguridad de las personas y otra que muestra la belleza de las ciudades. El estrés que nos supone el estar al tanto de tanta normativa técnica se desahoga con actividades artísticas, como la pintura, la música o la fotografía. Eso permite que nos convirtamos en humanistas en el sentido clásico de la palabra. El arte y la técnica se alían en Alfonso, y lo plasma con mucha sensibilidad”.