“Brindis” fotográfico por la gente de Jaén y su historia
La Barra acoge una exposición con imágenes del Archivo de Diario JAÉN
El entrañable Piturda junto con su carrillo de mano cargado de cartones es la imagen que “abre” el singular homenaje que Diario JAÉN, en colaboración con el Bar La Barra, brinda a la gente de pie, a los jiennenses anónimos, con la exposición Jaén bien vale una sonrisa. Esta reúne más de sesenta fotografías que recorren las últimas siete décadas en la capital, con sus vecinos como grandes protagonistas. Tesoros del inmenso Archivo que el periódico provincial ha construido a lo largo de sus siete décadas y media de vida. El emblemático bar de la Calle Cerón acoge esta muestra, que fue inaugurada por el periódico con un amplio respaldo de amigos, colaboradores y representantes institucionales. Por allí pasaron desde responsables de Caja Rural, como su director Comercial, José Márquez; Juan Gallego, director de la red de Oficinas, y Manuel Mora, director del Área de Seguros; el delegado territorial de Fomento y Vivienda, Rafael Valdivielso; el presidente de la Real Sociedad Económica de Amigos del País, el profesor Antonio Martín Mesa; la directora del II Plan Estratégico de la provincia, Inmaculada Herrador; la presidenta de la Asociación La Estrella, Antonia Collado, y el presidente de la asociación Arco del Consuelo, Antonio Lozano, entre otros. También acudieron el exdirector del periódico, José Luis Codina, y numerosos colaboradores, como Pepe Vica, Juan Manuel Molina Damiani, Manuel Pérez Perálvarez y Carmen Camacho, entre otros. Allí, el presidente de DIARIO JAÉN S. A., Eleuterio Muñoz; el director del periódico, Juan Espejo, y la comisaria de la exposición, la redactora jefa Manuela Rosa, les dieron la bienvenida y les mostraron esta pequeña muestra de uno de los grandes orgullos de esta casa, las fotografías históricas de su Archivo. Como anfitriones, la familia De Pablo Morales al completo.
“La mayoría de las fotografías que se exponen no necesitan palabras que las acompañen, hablan por si solas, como ese niño que pisa el charco en medio de la calle o un policía local delante de los regalos que le han hecho los ciudadanos. Estas denotan el cambio de la sociedad de Jaén de hace setenta, sesenta y cincuenta años hacía aquí, un termómetro impecable de todos los cambios de la ciudad”, explica el presidente, Eleuterio Muñoz. Estos son solo dos ejemplos de las más de sesenta imágenes que son todo un homenaje a esos hombres, mujeres y niños que, en alguna ocasión, brindaron una sonrisa a los fotógrafos de Diario JAÉN, los que construyen la historia cotidiana de esta ciudad. Entre las instantáneas, también gustaron mucho, por ejemplo, la de la primera promoción de Enfermería de 1973, los escolares de Maristas de los años 1952 a 1956; la salida de El Abuelo tras ser restaurado en el año 1993 en una abarrotada Plaza de Santa María; la calle San Clemente con Seiscientos aparcados y Land Rover circulando, en el 73, o unas guapas gitanillas por La Carrera en los años 60 por San Lucas. Esta iniciativa es una prolongación de los actos del 75 Aniversario del periódico. “Como reza nuestro lema Jaén más de lo que lees, tenemos que salir a la sociedad, interactuar con nuestra provincia. Estos actos parecen pequeños, pero son trascendentales para que la gente de Jaén conozca su periódico, la labor que lleva realizando más de 75 años”, destaca Eleuterio Muñoz. “Es esencial elegir escenarios que sean referentes sociales, como lo es, en este caso, La Barra en hostelería”, reconoce el presidente. De hecho, esta emblemática taberna es el escenario perfecto para este especial homenaje a la gente de Jaén en el que se cuenta, a través de imágenes, cómo ha caminado en las últimas décadas.
Se leía de principio a fin el Diario JAÉN que llegaba cada día al Bar Principal, el restaurante en el que entró con once años como botones. Cerca de cumplir los 86, emocionado, presenció la inauguración de la exposición Jaén bien vale una sonrisa en el negocio al que ha dedicado toda su vida, en el que ha visto crecer junto con su esposa, Alfonsa Morales, a sus dos hijos, Carlos y Fara, y después a sus cuatro nietos. Él es testigo, como Diario JAÉN, de la historia reciente de esta ciudad a la que adora y esta exposición está llena de momentos inolvidables y muchos jiennenses que él conoce. Carlos de Pablo Maroto es uno de los jaeneros más conocidos y queridos. Toda su vida ha transcurrido entre estas calles, desde el Cantón de Jesús, donde nació, a su taberna de Cerón, en la que se jubiló en el año 1996, La Barra. La dejó en buenas manos, en las de su hijo Carlos, pero nunca se despegó de ella.
No hay más que traspasar sus puertas para tener la certeza de que La Barra es un lugar con mucha historia. Y Carlos de Pablo Morales la resume: “A finales del siglo XIX, fue el primer banco que se funda en Jaén, la Banca de Santa María. Después, en torno a 1900, pusieron una tienda de objetos de escritorio y objetos de regalo, lo que vendría a ser una papelería. Ya a lo largo de la guerra, se convirtió en una bodega de vinos en la que vendían de todo. Y no sería hasta 1941, cuando ya se quedaría solo como bodega”. Su padre tomó las riendas en 1961: “Hace justo 55 años, los que yo tengo”.