El legado de Amparanoia

Amparo Sánchez resucita la banda por el 20 aniversario de su primer disco

13 abr 2017 / 11:50 H.

Nueve años después de poner punto final a “Amparanoia”, Amparo Sánchez, natural de Alcalá la Real, decide reencontrarse consigo misma y resucitar a su antigua banda para celebrar su legado y conmemorar, por todo lo alto, el veinte aniversario de su primer disco, El poder de Machín. Y el festejo comienza con El coro de mi gente, un disco en el que repasa su cancionero en la mejor compañía.

“Nos despedimos en 2008 con el Bye bye tour para cerrar una etapa y seguir creciendo e investigando con otras cosas. Pero todos estos años he tenido mucha presión del público, de promotores y de mi oficina de management, Sonde3, preguntando si hacíamos algo con Amparanoia”, admite a Europa Press la artista alcalaína.

El veinte aniversario de su exitoso primer álbum se reveló como la oportunidad para reflotar al grupo, en un proceso que empezó “llamando a amigos” para colaborar y que terminó “saliéndose” de aquel debut para que los participantes escogieran las canciones de Amparanoia que querían hacer. “Se iba dando forma al álbum, yo tenía el inédito El coro de mi gente que Macaco quiso hacer conmigo. Y a partir de ahí el resto de colaboradores fueron mandando sus grabaciones y fuimos haciendo el proceso de mezclas. Al mismo tiempo, nos hemos centrado en reunir a la banda y organizar una gira que empezamos ya en abril”, señala.

“Al final, la música es lo que nos une a todos los que estamos en el disco”, afirma, antes de nombrar a Joan Garriga, Macaco, Aterciopelados, Chambao, Sergent Garcia, Fito y Fitipaldis, Calexico y Gaby Moreno, Fermín Muguruza&Broken Brothers Brass Band, Marinah, Esne Beltza, Mouse Et Hakim, Mimi Maura con Los Aggrotones y Sergio Rotman.

En el álbum no faltan nombres como Depedro y Manu Chao, esenciales en los primeros años de Amparo Sánchez tras mudarse a Madrid a mitad de los noventa. “Manu Chao fue el padrino de Amparanoia, el primero que me dijo que tenía que grabar y que enseñar al mundo mis canciones”, destaca, para después añadir que con nombres de una nueva generación como La Pegatina también está presente. “Es la renovación del mestizaje”, afirma. Por eso, insiste en que todo lo que ocurre con el regreso de “Amparanoia” es “una sorpresa” que está “disfrutando mucho”. “Me he dado cuenta de que el público echaba mucho de menos a Amparanoia. Esto me está moviendo también algo dentro, de decir guau, cuánto me quieren y cuánto quieren esta propuesta”, dice.

Con el disco ya en la calle, es momento del regreso a la carretera para descifrar una de las incógnitas que la alcalaína se plantea constantemente: ¿Qué tipo de público irá a los conciertos? Porque han pasado veinte años. Amparanoia siempre fue un grupo familiar y popular, un fenómeno extraño. “Tengo mucha emoción y muchas ganas”, explica. Asimismo, añade que hasta ahora han hecho solo un concierto en la Sala Salamandra de Barcelona, en el que ella personalmente se dio “cuenta de cuánto” echaban todos de menos esa energía, incluida ella misma: “Pensaba que eran los demás, pero yo también”.

El plan es girar, e incluso tienen muchas ofertas internacionales. Por el momento, la gira comienza en el festival Sueños de Libertad y proseguirá por Viña Rock, GraniRock, Weekend Beach Festival, AlRumbo Fest y Hatortxu Rock. Después estará también, entre otros, en los festivales SonRías Baixas y Rabolagartija, y concluirá con dos citas especiales en La Riviera madrileña y en la Sala Apolo de Barcelona.