La edad dorada suma vida y rimas en un debut teatral

Entonación, ritmo y pausas respiratorias. Así ensayaron, durante días, los diez voluntarios del Centro de Participación Activa Maristas para su debut teatral en la Universidad Popular Municipal (UPM). Tras el telón, hubo más ganas que nervios. Estuvieron seguros de sí mismos y agradecidos a la compañía de Blanca Marsillach —y a la propia actriz— y la Obra Social La Caixa por permitirles, durante un día, sentirse como verdaderos actores.

Con este trasfondo comenzó la representación Entre versos y Marsillach, una función que hizo parada en Jaén y en la que se dramatizó la lectura de algunos poemas del Siglo de Oro, títulos seleccionados por el propio Adolfo Marsillach y rescatados por su hija Blanca.

Lope de Vega, Francisco Quevedo, Santa Teresa de Jesús, Góngora, San Juan de la Cruz y Miguel Hernández —quien, aunque no pertenece a este movimiento literario, si formó parte del repertorio escogido con poemas como Elegía a Ramón Sijé o La Boca— fueron los autores cuyas presencias volvieron a la vida a través de sus versos, que fueron interpretados oralmente por Marsillach, Begoña Mencía y los miembros del centro jiennense, entre los que se encontraron María Luna, Ana Fajardo, Rosario Jurado, Sebastiana Rodríguez, Juana Gutiérrez, Juan Miguel Martínez, Juan González, Ramón Cruz, Eufrasio Castellano y José Pareja.

Horas antes de la subida del telón, Marsillach recordó que esta actividad homenajeaba a los más mayores a través de ejercicios de memoria y análisis de textos, y afirmó: “Nuestro lema es: ‘Mientras sumas años a la vida, suma vida a los años’. Desde que mi padre estrenó esta obra en Almagro, junto a Amparo Rivelles y María Jesús Valdés, siempre quise volverla a hacer con personas coetáneas. Siento que él está aquí, entre nosotros”. Y es que la imagen del director teatral estuvo más que presente, proyectada en el fondo del escenario, y acompañando a los lectores en su periplo artístico en la capital.

Esta iniciativa partió, además, como parte del programa Centenario de la Obra Social La Caixa, cuyo representante, Rafael de Porras, estuvo en la presentación de previa del espectáculo, acompañado de la delegada territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Teresa Vega, y la concejal de Cultura, Isabel Azañón.

Así, entre rimas y literatura, los mayores agradecieron a los organizadores de este encuentro y la oportunidad ofrecida porque, según indicaron, también sirven para algo más que cuidar nietos. Y es que estar jubilado no significa haberlo hecho ya todo en la vida.