¿Los soldados romanos a caballo por La Carrera?

La Semana Santa de Jaén tiene también un especial hueco entre los miles de “joyas” que atesora el Archivo fotográfico de Diario JAÉN. Y una estampa de lo más singular se acaba de sumar a Jaén bien vale una sonrisa, la exposición dedicada a los jiennenses anónimos a través de imágenes históricas del periódico que se puede ver en el Bar La Barra. Esta refleja al Cuerpo de Caballería de los Soldados Romanos en pleno Viernes Santo, en la calle Bernabé Soriano, en los años setenta. Una imagen, la de los romanos a lomos de los equinos en plena carrera oficial, que quedó grabada en la retina y la memoria de miles de jiennenses y que, desde esa década, no ha vuelto a producirse, ya que se vieron obligados a salir a pie por la falta de cuadrúpedos.

Ahora esta fotografía, impresa en gran formato, invita desde la fachada de La Barra, en plena calle Cerón, a los jiennenses a entrar a este establecimiento capitanedo por Carlos de Pablo para conocer esta exposición que reúne más de sesenta fotografías que recorren las últimas siete décadas de vida en la capital, con sus vecinos como grandes protagonistas. Desde que se inaugurara a mediados de febrero, son ya miles los clientes de La Barra que se han reencontrado con parte de la historia de su vida, su ciudad y sus vecinos. Muchos se han reconocido a sí mismos en estas imágenes, o a familiares y amigos. Ahora, en plena Semana Santa, la nueva fotografía de los soldados romanos a caballo entusiasma a cientos de jiennenses que pasan por esta calle, a unos pasos de la carrera oficial, como destaca el responsable de La Barra. Son muchos los que todavía recuerdan nostálgicos aquellas procesiones.

En el interior, no defraudan estas más de sesenta imágenes seleccionadas como un homenaje a esos hombres, mujeres y niños que, en alguna ocasión, brindaron una sonrisa a los fotógrafos de Diario JAÉN. Entre ellas, está la de la primera promoción de Enfermería de 1973, los escolares de Maristas de los años 1952 a 1956; la salida de El Abuelo tras ser restaurado en el año 1993 en una abarrotada Plaza de Santa María; la calle San Clemente con Seiscientos aparcados y Land Rover circulando, en el 73, o unas guapas gitanillas por La Carrera en los años 60 por San Lucas. Un verdadero viaje en el tiempo que despierta miles de emociones a los más nostálgicos o hace descubrir peculiaridades de la ciudad, como el cuerpo de caballería de Viernes Santo, para quienes no las han vivido.