Los toros y la música, unidos
Gran acogida a la conferencia concierto que abre el año en La Económica
La Real Sociedad Económica de Amigos del País arrancó el año con una cita innovadora y con su salón de actos totalmente lleno y expectante. Una narración musicada, que bien podría definirse también como un concierto glosado, que versó sobre la armoniosa relación entre la música y los toros, y que de una forma amena y distendida ofreció, durante algo más de una hora, Lope Morales Arias, acompañado al piano de Luis Arias Fernández y a la flauta de Lope Morales Moya. Y que, como no podía ser de otra manera, comenzó con una puntualidad taurina.
“La idea de este formato surgió porque yo soy un aficionado a los toros y tengo un hijo músico, que estudia en Madrid. Entonces, hablando los dos y viendo las similitudes que hay entre la música y los toros, dos artes muy cercanas, planteamos contar esta relación. Investigamos y sacamos los dos grandes apartados que componen esta conferencia”, indicó antes de comenzar la cita Lope Morales. Un repaso exhaustivo pensado no solo para los aficionados, sino también para todas aquellas personas interesadas en conocer un poco más de ambas manifestaciones artísticas de una forma cercana.
“En la música, como en los toros, como en la vida misma, se requieren ciertas actitudes y maneras que tienen mucho que ver con conceptos compartidos: el ritmo, el temple, la armonía, la cadencia o el compás. Ya lo decía Rafael de Paula, el inspirador de Bergamín: Se torea al compás, como se baila y se canta, a compás. Pero también como se vive o ha de vivirse, a compás...”, explicó al inicio de la jornada Lope Morales.
Ambas expresiones artísticas son, en su opinión, las más significativas y cuentan con muchas semejanzas: “Ni todos los toros son iguales ni todos los instrumentos, y se podría decir que hay tantos encastes como instrumentos”, explicó entre otros muchos símiles.
El programa se dividió en dos partes. En la primera de ellas trató sobre la música en los toros. “Nadie imagina una corrida sin banda e, incluso, una plaza se puede reconocer por su música y por sus músicos”, argumentó Morales. Una función identificadora la que tienen los diferentes sones que se interpretan en los cosos taurinos del país, a la que se suman otras muchas, como la reguladora, con la que se notifican las órdenes para la que antes se utilizaban los pífanos, con toques al comienzo de la lidia, a la salida de cada toro y para el cambio de tercio, de los que se pusieron ejemplos musicales. En el caso de la función protocolaria, destacó la interpretación del himno nacional y, en el de la de acompañamiento a la faena, subrayó que la pieza que suele acompañar a los diestros es el pasodoble —aunque también puso otros ejemplos más particulares que suenan en plazas como la de Beas de Segura durante la celebración de San Marcos o la de Zaragoza en la Virgen del Pilar—.
En este punto, Morales Moya y Arias Fernández interpretaron algunos de los ejemplos más emblemáticos de los nombrados en este apartado, como uno de los pasodobles del Maestro Cebrián.
La segunda parte se centró en el papel de los toros en la música, de tal forma que Lope Morales realizó un relato general sobre los diferentes géneros musicales. Y, como del pasodoble ya trató en el apartado anterior, comenzó con la copla, consolidada a principios del pasado siglo con identidad propia, y con unos roles muy definidos. Tras la interpretación de Francisco Alegre, de Manuel López-Quiroga, también se centró en la relación entre los cantaores de flamenco y el toreo, y viceversa: “Fuera de España se trata de las dos manifestaciones artísticas que más nos definen. Pero, lo que realmente me parece una pena, es que en el caso de los toros no hayamos conseguido su catalogación como Patrimonio de la Humanidad”. En el caso de la zarzuela, el toreo también ha sido históricamente una temática frecuente, y como ejemplo sonó Pan y Toros, de Francisco Asenjo.
El papel de la tauromaquia en la música clásica también es un hecho, como demuestran la obra de autores como Albéniz, Granados o Joaquín Turina, mientras que en el caso de la ópera destacó el caso del maestro Manuel Penella, compositor de El gato montés, o Carmen de Biset.
lope morales. Autor de los textos y guion, a lo largo de su vida ha desarrollado diferentes actividades relacionadas con la tauromaquia.
Luis Arias. Inició sus estudios musicales a los seis años y, a pesar de su juventud, cuenta con una amplia trayectoria musical.
Lope Morales Moya. Comenzó su formación musical a los 9 años, y colabora con la Orquesta Santa Cecilia de Madrid, con la Sinfónica de Córdoba y con el Plural Ensemble.