Una estatuilla masculina que reivindica el papel de la mujer
La forma del agua, de Guillermo del Toro, es la gran triunfadora de los Oscar
Es la estatuilla dorada más codiciada del séptimo arte, cumple 90 años y, aunque tiene nombre masculino, en esta edición, se entregó en una ceremonia en la que las mujeres reivindicaron su papel en la industria cinematográfica para mostrar su apoyo al movimiento Time’s Up, que versa sobre los escándalos sexuales sufridos en los últimos años. Así comenzó la gala de los Oscar, un encuentro en el que su presentador, Jimmy Kimmel, no dudó en poner su nota de humor: “Oscar es el hombre más querido y respetado de Hollywood. Solo hay que verlo: deja las manos donde puedan verse, no dice una palabra desagradable y, lo más importante, no tiene pene”.
La cinta La forma del agua, del director Guillermo del Toro, se coronó como la gran triunfadora de la noche al hacerse con cuatro premios, entre ellos, el de Mejor Película y el de Mejor Dirección. “Soy inmigrante, como muchos de vosotros, y una de las mejores cosas que hacemos en nuestra profesión es borrar las líneas en la arena que nos separan”, afirmó el cineasta mexicano. Los pronósticos se cumplieron con los galardones de Frances McDormand, protagonista de Fargo, y Gary Oldman, de El instante más oscuro, como Mejor Actriz y Mejor Actor, respectivamente.
Allison Janney se hizo con el Oscar a la Mejor Actriz de Reparto por su papel de madre maltratadora en Yo, Tonya. “Lo he hecho todo yo solita”, dijo entre risas en su discurso de agradecimiento. Sam Rockwell, también favorito en su categoría, se hizo con el premio al Mejor Actor de Reparto por su papel de agente de policía racista y paleto en Tres anuncios en las afueras.
El Oscar al Mejor Cinta en Habla No Inglesa fue para el largometraje chileno Una mujer fantástica, mientras que el Oscar a la Mejor Película de Animación se lo llevó Coco, la última producción de Pixar que también se alzó con el galardón a la Mejor Canción por Remember Me. El premio al Mejor Documental fue para Ícaro, de Netflix. El “meme” de la noche fue para Meryl Streep que, desde el patio de butacas del Dolby Theatre, voceó como lo hiciera el año pasado.