Una final de muy alto nivel

Si en otros lugares fue día de duelos y quebrantos, en Jaén la sardina estaba vivita y coleando. Y a quien le gusta el Carnaval se le notan las ganas. El teatro Darymelia estaba a tope de gente, con todo el aforo vendido en la final de las agrupaciones carnavalescas. Además de ser un público que disfruta y vive el Carnaval, estaba plenamente entregado con las comparsas y chirigotas participantes y aplaudía con entusiasmo todas las actuaciones.

Las seis chirigotas y comparsas, dieron lo mejor de sí sobre el escenario del Teatro Darymelia, por un lado, por la vergüenza torera y, por otro, para hacerse con uno de los seis premios. Porque, eso sí, todas las finalistas recibieron un premio. La dotación del primero para chirigota y comparsa era de 800 euros; la del segundo, de 500, y la del tercero de 300. Lo que suma una cantidad total de 3.200 euros.

La fortuna les sonrió a todos, pero los que se hicieron con los primeros premios fueron la chirigota “Los niños de la Verónica” y la comparsa “Con Destino” (El Revuelo), de Jaén. En chirigotas, el segundo premio fue para “Los empalagosos”, de Jaén, y la comparsa “La oscura riqueza”, de Andújar. El tercer premio se lo llevaron la chirigota “El rey de la pista” y la comparsa “La Compañía”, de Granada.

En esta edición de la final del Carnaval, destacó la puntualidad. Todas las agrupaciones siguieron al pie de la letra el guión de las indicaciones del Patronato de Cultura, Turismo y Fiestas, organizador del acontecimiento, y empezaron y acabaron cuando tocaba, o sea cuando dejaban de tocar. Casi todos los grupos dedicaron una canción a Pablo Ráez, el joven malagueño, marbellí, fallecido el pasado sábado a consecuencia de una leucemia. Algo que tuvieron que hacer sobre la marcha. Un ejemplo, la comparsa Mercenarios del Carnaval, de la agrupación granadina La Compañía, comentaba tras su actuación, que fue la primera: “La letrilla la escribimos ayer, todo deprisa, y queríamos cantarla en la final, por la lucha que ha llevado a cabo Pablo Ráez y su campaña para la donación de médula”.

Por otro lado, la chirigota Los Empalagosos (El Pitufo), de Jaén, incluyeron en su repertorio música de cuplés de los hermanos Carapapa, de la comparsa gaditana Los Chatarra que la sacaron el año pasado.

Otra de las comparsas de la capital, Con Destino, de la Asociación El Revuelo, de Jaén, nacida en 2007, montó un pasodoble dedicado a Pablo Ráez, escrito por Alberto Rueda Torres, su letrista. La comparsa el año pasado se llamó Sin Destino, y ganó el primer premio. Este año repite como ganadora, ya “Con Destino”.

Al concurso de Carnaval se presentaron 9 chirigotas y 7 comparsas. Un número de agrupaciones, dieciséis en total, que ponía de manifiesto que tanto la capital, como la provincia, se vuelcan con el Carnaval.

Las nueve chirigotas participantes en la primera fase fueron: “Made in Bla Car” (Jaén), “Los niños de la Verónica” (Lopera), “Los Empalagosos” (Jaén), “Los defectos especiales” (Armilla-Granada), “El Rey de la Pista” (Bailén), “Los Várgame” (Jamilena), “Mándame la ubicación que me he perdío que sin querer ya le he metío” (Torredelcampo), “Gorrón y cuenta nueva” (Jaén) y “Los enchufaos” (Bailén). Las comparsas fueron: “La magia de los imposibles” (Jaén), “La cosa nostra” (Jaén), “Yo soy tu dueño” (Martos), “La Compañía” (Granada), “La oscura riqueza” (Andújar), “Ave Fénix” (Martos) y “Con destino” (Jaén).

En la fase final el jurado tuvo en cuenta la puntuación obtenida en la primera ronda para sumarla, de forma que su decisión estaba basada en ambas actuaciones de las agrupaciones.

Esta es la letrilla que su autor, Alberto Rueda, de la comparsa Con Destino, dedicó a Pablo Ráez:

San Pedro abre por favor

Va pal cielo un malagueño

Y aunque cansao de luchar

De luchar

Se nos marchó sonriendo.

Dejó en la tierra un mensaje de bondad

De optimismo y esperanza

Y de siempre disfrutar

De siempre disfrutar

Que la vida pasa.

Dos alas blancas...

Dos alas blancas.

Y a tanta gente concienció

Su médula ofrecían

Para hacer la donación

Si no salvó su vida

Sabe Dios las que salvó

Y las que salvará desde ahí arriba

Y yo me vuelvo a preguntar

¿Por qué somos tan necios

Aquí en la tierra mía?

Porque se le debía

Un homenaje de verdad.

Y aunque ya nada valdría

Se merecía

Como reconocimiento

Ser el hijo predilecto

De su madre Andalucía.