El milagro verde de lograr un ascenso histórico a Segunda B

Una de las noticias deportivas más importantes de este año la protagonizó el Atlético Mancha Real. El club verde, fundado en 1984, consiguió el ascenso a Segunda B después de una impresionante eliminatoria de campeones con el Zamora, al que primero superó en el Estadio de La Juventud por el resultado de tres a uno y a continuación volvió a derrotarlo por cero a dos. El día 29 de mayo ya está grabado con letras de oro en la historia de la ciudad. Para llegar a la División de Bronce, el conjunto verde tuvo un camino marcado por la regularidad que le permitió conquistar el título de campeón del grupo noveno de Tercera División, por segunda vez en su historia, y participar en la Copa del Rey. Juan de Dios Hermoso, como presidente de la entidad, Juan Arsenal, entrenador, y Ramón Ruiz, capitán del equipo (en la imagen), recuerdan el momento vivido y la gesta para un club modesto. “La pasada campaña resultó maravillosa y tuvo el premio de un histórico ascenso a Segunda División, algo inimaginable en nuestro municipio”, destacan los tres. Ellos se muestran esperanzados en que el equipo consiga la permanencia en su estreno en el grupo cuarto, aunque advierten que el camino será complicado por la competitividad y el potencial de la categoría. “Estamos preparados para los buenos y los malos momentos. Ahora se ha superado una situación delicada y se han logrado tres victorias consecutivas, que nos ha permitido subir puestos y contar con 20 puntos en la clasificación”, señalan. El Atlético Mancha Real, con un presupuesto de 180.000 euros, es el más bajo de la categoría, lo que no le impide lograr resultados destacados ante conjuntos con un mayor potencial. Empató en los campos del Granada B B y el Real Jaén, además de ganar al Murcia en su campo. El binomio equipo-afición funciona perfectamente. Una media de unos 1.000 aficionados acude cada dos semanas al Estadio de La Juventud. “Ellos son determinantes en que estemos en Segunda División B. Su apoyo constante es un estímulo para conseguir la permanencia y cada resultado que logramos se lo dedicamos a ellos por el apoyo que ofrecen”, argumentan el presidente, el entrenador y el capitán del Atlético Mancha Real. Ellos representan a un colectivo humilde, pero que es inmensamente rico en valores.