La selección española se impone con sufrimiento

La selección española de balonmano masculino logró su segunda victoria en el Europeo de Croacia ante Hungría (25-27), en un encuentro en el que los de Jordi Ribera sufrieron para desarmar a la consistente defensa magiar y mantenerse invictos antes de enfrentarse a la potente Dinamarca. Los “Hispanos”, que tuvieron un plácido debut ante la República Checa (32-15), se marcharon con la mínima ventaja al descanso ante una Hungría que mejoró sus prestaciones respecto a su duelo con Dinamarca (32-25). La lesión de Gedeón Guardiola, la segunda del campeonato para el equipo, fue la nota negativa de un gran duelo de hombres como Adrià Figueras, Alex Dujshebaev, Aitor Ariño o Valero Ribera. La imprecisión marcó los primeros minutos en el Arena Varazdin; el buen hacer del portero del Veszprem Roland Mikler, con dos paradas en los primeros cinco minutos, permitió al cuadro magiar manejar las primeras ventajas, sustentadas en un único tanto de diferencia. Ante la rocosa defensa de los de Ljubomir Vranjes, Adrià Figueras se convirtió en un auténtico quebradero de cabeza, desplazándose cómodo en la línea de 6 metros; el pivote del Fraikin BM Granollers rompió la zaga húngara y así, poco a poco, los ‘Hispanos’ fueron ganando confianza para alcanzar su máxima ventaja en el minuto 22 después de un parcial de 3-0 (7-10). La idea en la segunda parte era clara, y pasaba por armar contraataques, dadas las dificultades con las que se estaban encontrando en el juego posicional. El duelo se convirtió entonces en un correcalles que hizo que los de Vranjes se acercasen en el luminoso. El liderazgo de Ribera se vio acompañado del excelente trabajo de Aitor Ariño, el extremo del FC Barcelona que acudió a la llamada del seleccionador para sustituir al lesionado Fernández.