Poels se lleva el premio gordo en Las Allanadas

Todos esperaban que Chris Froome o Míkel Landa levantaran los brazos en la meta de Las Allanadas y uno de los dos se enfundara el maillot de líder de la Vuelta a Andalucía, pero la carretera manda, en este caso tres kilómetros duros y exigentes, reservados para ciclistas más en forma y que llegan con más rodaje a la Ruta del Sol. En ese ramillete de candidatos a la victoria se encontraba Wout Poels, compañero en el Sky del cuádruple ganador del Tour de Francia. El holandés es un ciclista que combina elegancia en el pedaleo con una fuerza demoledora en este tipo de ascensiones. Froome sabía que Poels era la rueda buena y le dio plena libertad de movimientos para responder a los ataques de un voluntarioso Tim Wellens (Lotto Saudal), un inspirado Luis León Sánchez (Astana) y un ambicioso Míkel Landa. Las Allanadas, en pleno corazón de La Guardia y Sierra Mágina, es un puerto corto, con rampas medias de un 12 por ciento, aunque se encuentran zonas del 20. Los ciclistas se emplearon a fondo para seguir la estela de los primeros clasificados. Poels se coronó primero en el puerto y su éxito tuvo el premio gordo de acceder al liderato con una ventaja de dos segundos con respecto a Luis León, que hace unos días venció en la Vuelta a Murcia, y Tim Wellens, muy activo en la jornada de ayer. Landa terminó cuarto a cuatro segundos, al igual que Jakob Fuglsang, mientras que Froome se dejó ver con una séptima posición a 27 segundos del líder. El británico ha dado órdenes a su equipo para resguardar a Poels de los ataques de otras formaciones y, si no surge sorpresa alguna, la prueba se decidirá en la contrarreloj de Barbate (Cádiz). Poels se convirtió en el tercer ganador en Las Allanadas y se sumó a Chris Froome (2015) y Sergio Pardilla (2010), aunque La Guardia, en su casco urbano, tuvo una llegada en 2012, con triunfo de Dani Moreno, que militaba en el Katusha. Fue la última etapa que coronó como ganador de la general al incombustible Alejandro Valverde, el gran ausente en la edición de 2018. Cada etapa presenta a una galería de corredores modestos que, desde el anonimato, saltan del pelotón en busca de un éxito de etapa. El francés Alexis Gougeard (AG2R), el holandés Pascal Eenkhoorn (Lotto Jumbo) y el español Diego Rubio (Burgos) fueron los protagonistas de la jornada con una escapada que llegó a alcanzar los tres minutos de ventaja sobre un pelotón del que empezó a tirar el Astana, como sucedió en la primera jornada entre Mijas y Granada. A falta de ocho kilómetros para el final se quedó Eenkhoorn. Rubio y Gougeard empezaron la última subida con 1:15 de ventaja, con más de cinco kilómetros por delante, pero no pudieron aguantar la presión de sus rivales y primero el francés y después el español fueron absorbidos por la máquina del Astana. En una jornada con masiva presencia de aficionados, los dos corredores jiennenses en el pelotón, Javier Moreno y José Manuel Díaz, se dejaron ver en un trazado que conocen a la perfección. Moreno, que llega de ganar en los Emiratos Árabes el Sharjak Tour, terminó decimoquinto y es el primer andaluz clasificado de los seis que compiten en la sesenta y cuatro edición, mientras que Díaz fue trigesimoprimero. Ambos tienen margen para mejorar su rendimientos en las tres etapas que faltan.