Una victoria con margen de mejora

El inicio de temporada del Linares está siendo muy satisfactorio en cuanto a resultados. En la tarde de ayer el conjunto minero cosechó tres puntos más frente al Melistar y mantiene el pleno de victorias en casa. Sin embargo en lo referido al juego —corroborado posteriormente por Aguado— el Linares tiene aún un margen de mejora. El míster azulillo contaba con las bajas de Pablo Ortiz y Javi López, dos piezas fundamentales en el engranaje táctico.

Con el fin de suplirles Joseba Aguado dio entrada a Juanfran en el centro del campo y adelantó a José Manuel al puesto de 9. Pasar de jugar con dos delanteros en el once habitual a jugar con uno, que no es referencia de ataque, supuso demasiado cambio en los automatismos y, durante los primeros 45 minutos, el Linares lo notó. El Melistar saltó al césped con la idea de presionar arriba con sus dos puntas sobre la salida de pelota local y Juanfran y Sergio se vieron ahogados para recibir y levantar la cabeza. La posesión local, por tanto, se tornó estéril durante el primer tiempo. Además el equipo norteafricano defendió con dos líneas muy juntas, —en ocasiones cerrando con 5 hombres— por lo que el espacio entre líneas era mínimo. Solo cuando Barba pudo girarse sobre su marca o cuando Admonio con alguna conducción pudo pisar campo rival, el Linares hilvanó alguna jugada cerca del área. La mayoría del peligro llegó desde centros laterales y tanto Braim como Barba estuvieron cerca de hacer el primero de cabeza en el 16 y el 35. El Melistar, por su parte, no renunció a atacar, pues con el balón mostró soltura y llevó el partido a una total igualdad hasta el descanso.

Aguado, consciente de los problemas de los suyos, tomó dos decisiones en el descanso que se tornaron fundamentales para encauzar la victoria. La primera fue la entrada de Pekes como punta de lanza, lo cual permitió ordenar al resto de piezas en sus posiciones habituales. José Manuel volvió a la mediapunta y Barba a banda izquierda, y sus constantes caídas por dentro liberaron el carril para que Chomfli, extremo en la primera parte, pudiera llegar sorprendiendo desde el lateral. Y la segunda decisión fue la recolocación de Juanfran. Con balón el mediocentro se incrustó entre Ibra y Admonio y provocó que las dos puntas visitantes, que en la primera parte se emparejaron en la presión con los dos centrales azulillos, tuvieran un foco más que atender.

Así, el trío Ibra, Juanfran, Admonio, siempre encontró a unos de ellos libre y la salida de pelota comenzó a fluir. El golpe en el marcador se hizo esperar pero acabó llegando por su propio peso. José Manuel avisó en el 63 con un remate a las nubes pero 5 minutos después encontró premio. Braim la puso desde la izquierda al segundo palo, Admonio —partidazo el suyo— la ganó por arriba y José Manuel la mandó a las redes. Pero si bueno fue lo que hizo el equipo para adelantarse, aún mejor fue su gestión del resultado, pues en lugar de recular siguió golpeando la meta visitante en busca del segundo. Aguado agitó la banda derecha con la salida al campo de Siles y el extremo respondió. El Linares abría bien el campo en cada contra y en una de ellas mató el partido. Pekes corrió al espacio en el 94, se adelantó a su marca y sirvió en bandeja a Braim que definió a la perfección.

El Linares se afianza en la zona alta y prepara una racha de choques muy duros. Próximo objetivo: sacar algo positivo en el complicado estadio de El Palo.