El mundo árabe con otra mirada

El paraje de El Algarrobo es para ella el perfecto remanso de paz al que se retira durante el verano. En su casa rural, situada a unos dos kilómetros y medio de Fuensanta, puede dedicarse a escribir e investigar.

04 ago 2015 / 10:40 H.

“En el campo trabajo divinamente y me permite también hacer ejercicio físico en la piscina”, confiesa. Licenciada en Filología Árabe por la Universidad de Granada, ha enfocado su camino profesional, fundamentalmente, tanto por su producción literaria como por sus investigaciones sobre el mundo árabe. Así, después de culminar su carrera, cursó un máster de Especialista en Fondos Documentales Árabes. En la actualidad, tiene en trámite su tesis doctoral con Clara María Tomás sobre la poetisa marroquí Widad Benmoussa, de la que tiene cuatro libros traducidos.

Tiene especial ilusión en el Certamen Internacional de Poesía “Manuel Ortas Castillo-Encarnación Sánchez Arenas”, que se prepara para publicar con la editorial Mandala Ediciones.

Entre sus proyectos en cartera tiene también la puesta en marcha de un Centro de Documentación Virtual sobre Arqueología Islámica en Jaén, una iniciativa novedosa en el panorama cultural jiennense. El próximo diciembre participará en el congreso “escritoras locas” del Grupo de Investigación “Escritores y escritura” de Filologías Integradas de la Universidad de Sevilla del que forma parte, con una investigación sobre la eminente escritora libanesa May Ziyadah. Para ello ha tenido que documentarse desde cero, pero el resultado merecerá la pena. Y, el verano próximo, presentará su obra “Pasamos por la vida”, para lo que cuenta con el apoyo de la concejal de Cultura de Fuensanta, Lourdes Contreras. Ha impartido talleres de métrica española en diversos municipios de la provincia. De Fuensanta guarda recuerdos de su infancia en casa de su tía María, donde pasaba la feria de la Virgen de las Mercedes con sus primos y aquellas interminables noches en los chiringuitos de chocolate con churros, cuando iba con su padre en vacaciones de Navidad a la campaña de aceituna o la época de la matanza, con la familia de su madre, que eran diez hermanos. Su relación familiar con Fuensanta es, sobre todo, con sus primos y su tía Paqui, que vive en la casa del centro del pueblo en la que ella nació.

Está casada y se puede decir, sin caer en el tópico, que “felizmente”, con Francisco Javier, médico del Instituto Psicopedagógico Virgen de la Capilla de la capital. “Es un ángel del cielo”, comenta con una sonrisa. Desde el año 2011 mantiene un blog literario en internet, en el que se puede consultar su historial científico y toda su producción poética, además de conferencias, recitales y otras actividades.
Sus padres le inculcaron la actitud de superación y de esfuerzo en el trabajo y ante la vida. Una filosofía con la que hace camino al andar, como diría Machado.