El juez Pablo Llarena retira la euroorden contra Puigdemont

Denuncia que existe una falta de compromiso por parte del tribunal alemán

20 jul 2018 / 08:19 H.

El magistrado del Tribunal Supremo que instruye los hechos relacionados con la deriva soberanista en Cataluña, Pablo Llarena, rechazó ayer que el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont sea extraditado desde Alemania solo por el delito de malversación de fondos públicos, como ha acordado el Tribunal Regional de Schleswig-Holstein, y denuncia “falta de compromiso” de este tribunal con unos hechos que podrían haber quebrantado el orden constitucional español.

Así lo acuerda el juez instructor en un auto en el que también deja sin efecto la Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) y la internacional contra Puigdemont además de otros fugados, como son los exconsejeros Toni Comín, Meritxell Serret, Lluis Puig y Clara Ponsatí y la secretaria general del ERC, Marta Rovira. No obstante, se mantiene vigente la orden de detención nacional que conllevaría su arresto en territorio español.

El magistrado argumenta que, con su decisión, el tribunal regional alemán ha anticipado un enjuiciamiento para el cual no tiene ninguna cobertura normativa y considera que no se ha realizado una ponderación en abstracto del pronóstico de tipicidad sospechado, esto es, la posible comisión del delito de rebelión por el que se pedía su entrega, sino que se ha abordado “el definitivo juicio de los hechos en los tipos penales”.

Por ello añade que la decisión del tribunal alemán no se sujeta a los preceptos de la Decisión Marco sobre la Orden de Detención Europea, ni a la jurisprudencia del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (TJUE), ni al Manual sobre la euroorden elaborada por la Comisión Europea. A su juicio, el órgano judicial debería limitarse tan solo a comprobar si los hechos descritos por la jurisdicción española están contemplados en la legislación penal de Alemania y si, en el caso de haberse cometido rebelión, se impulsaría una investigación penal semejante a la que se sigue en el Tribunal Supremo.

Llarena responde a la decisión del Tribunal Regional de Schleswig-Holstein de entregar a Puigdemont solo por el delito de malversación al entender que los actos que se le imputan no se corresponden en Alemania ni con el delito de rebelión ni con el de perturbación del orden público.