Luis Tejeiro: “Nunca recibí órdenes de la Infanta”

El excontable del Instituto Nóos dice que no la conoce

10 mar 2016 / 07:30 H.

El excontable del Instituto Nóos Luis Tejeiro, quien este miércoles declaró como testigo en el juicio del caso Nóos, subrayó que Iñaki Urdangarin y su exsocio Diego Torres fingieron la contratación de empleados en la entidad y en otras empresas de su entramado, entre ellas Aizoon —de cuya mitad es propietaria la Infanta Cristina—, en aras a simular la actividad de estas entidades así como justificar y “ennegrecer” los ingresos que obtenía que de forma irregular obtuvieron de las Administraciones.

En una tajante comparecencia, Luis Tejeiro aseveró que los empleados en cuestión ni trabajaban ni cobraban nómina de las entidades a pesar de haber sido dados de alta en la Seguridad Social, lo que permitía aumentar los gastos deducibles a Hacienda además de disminuir la base imponible y la cuota a pagar en el Impuesto de Sociedades.

Luis Tejeiro declaró, en la misma línea, que ya lo hizo su hermano y el otro de los contables del Instituto, Marco Antonio Tejeiro —acusado por estos hechos—, al aseverar que mediante esta práctica tanto Urdangarin como Torres convertían los fondos de los contratos simulados en dinero negro. Y ello puesto que el importe de las nóminas, al no abonarse a los presuntos destinatarios y sí contabilizarse como gasto, desaparecía del tráfico mercantil y acababa en manos de ambos acusados. De este modo, los responsables del Instituto Nóos ennegrecían así parte de los fondos públicos percibidos. En este sentido, responsabilizó por igual a ambos exsocios, si bien ha manifestado que Torres, marido de su hermana Ana María Tejeiro, era quien “controlaba que todo cuadrase”.

Por otro lado, Juan Pablo Molinero, exempleado de la mercantil Nóos Consultoría Estratégica —una de las empresas que integraban el entramado urdido por Iñaki Urdangarin y Diego Torres para desviar fondos públicos— manifestó que en la entidad había dos “jefes” por los que “pasaba absolutamente todo” —en referencia a los dos exsocios—. “No se movía un papel, contrato, factura o un algo sin que lo supervisaran los jefes”, aseveró.