Mariano Rajoy evita confirmar su reunión con Puigdemont

Hace hincapié en que está dispuesto a hablar con el Gobierno catalán

23 feb 2017 / 10:36 H.

El jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, evitó confirmar o desmentir si el pasado 11 de enero mantuvo una reunión con el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, e hizo hincapié en que él está dispuesto a hablar con el Gobierno catalán. “Quiero hablar, pero quiero hablar de los problemas reales y no de liquidar España”, enfatizó. Según publicó en su edición de ayer “La Vanguardia”, Rajoy y Puigdemont se vieron el pasado 11 de enero en un almuerzo en el Palacio de la Moncloa. Fuentes del Ejecutivo declinaron confirmar o desmentir un encuentro entre ambos y se limitaron a señalar que solo informan de la agenda pública del presidente. En declaraciones en los pasillos del Congreso, tras responder a las preguntas de control, Rajoy fue preguntado en un par de ocasiones si esa entrevista se produjo, pero esquivó el asunto. “La posición, que hoy recoge un medio de comunicación, mía es la de siempre”, dijo, para añadir que él quiere tratar con el Gobierno catalán “los temas que afectan a la gente”. En este sentido, dice que le gustaría que Puigdemont se implicase en los acuerdos de la Conferencia de Presidentes porque se habla de asuntos como la financiación autonómica, la dependencia, el empleo o los problemas demográficos. “Yo quiero hablar también de los Presupuestos, de las inversiones y de las infraestructuras”, destaca. Es más, Rajoy indicó que quiere “intentar que todos” hagan un esfuerzo para recuperar la cohesión interna para que la Generalitat no esté “condicionada” por grupos extremistas que, a su juicio, puede afectar al “modelo económico y social de Cataluña”. Rajoy insistió en que quiere hablar de estos asuntos que preocupan a los ciudadanos, pero dejó claro una vez más que él no puede hablar de cómo se pone de acuerdo “con los señores independentistas” para saltarse la ley conjuntamente”. Según recalcó, como presidente del Gobierno tiene la obligación básica de “cumplir y hacer cumplir la ley” y no puede autorizar un referéndum que pretende “liquidar” la soberanía nacional y que una parte de los españoles no puedan opinar sobre lo que quieren que sea su país. “Por tanto, es momento de volver a la sensatez, al sentido común y terminar con esto, que lleva ya cinco años y no ha conducido a nada positivo para los ciudadanos de Cataluña. Mi disposición es la mejor y yo efectivamente quiero hablar, pero quiero hablar de los problemas reales y no de liquidar España ni la ley”, concluye. Por su parte, Puigdemont, evitó confirmar o desmentir que se reuniera el 11 de enero con Mariano Rajoy, y dijo que no hay negociaciones formales entre ambos.