Orgullo de todos los jiennenses

Sumergida en un paisaje olivarero, la provincia destila a cada paso esencias de aceite de oliva. Basta con recorrer la Feria de los Pueblos para ser consciente de la transcendencia que el oro líquido tiene para los jiennenses. Cada uno de los municipios presentes en la cita tienen sus expositores repletos de su bien más preciado. Las cooperativas aprovechan para presentar los aceites de la última cosecha en todos los formatos, embalajes y calidades. Es, al fin al cabo, el embajador de Jaén, el producto por el que la provincia puede presumir al mundo entero.

Desde Cabra del Santo Cristo hasta Canena, pasando por Higuera de Calatrava hasta llegar a Villargordo. Aunque todos tienen sus peculiaridades y denominaciones, les une el olivar y los mejores jugos de aceituna. Es el caso de Aceites Andaluces Sierra Mágina (Magnasur), que se presenta en la Feria de los Pueblos con una amplia variedad de artículos con los que quiere conquistar, además del corazón de los jiennenses, el resto del mundo. Esta empresa es solo una muestra de todas las que concurren a la tercera edición de la muestra, que aprovechan para celebrar degustaciones con el fin de ganarse el paladar del público.

La mayoría de las cooperativas cuida al máximo tanto la imagen como la presentación de sus aceites, no solo en el envasado, sino también en su promoción a través de dípticos con información pormenorizada y traducida a varios idiomas, conscientes de la importancia que tiene para su viabilidad las exportaciones. Es tal el protagonismo del olivar en la feria que nada más acceder al pabellón principal de Ifeja un estand llama la atención del visitante con los ocho aceites ganadores de la última edición del Jaén Selección. Así, uno puede disfrutar con el sabor de cada uno de ellos y la calidad del producto, que, a la postre, es la mejor inversión de futuro y garantía de defensa del olivar jiennense. Además, una de las novedades es que se pueden ver presentados en un estuche elaborado en madera de olivo y que contiene el cuadro “Formas en tierras de Secano”. Esta caja premium lleva la firma de la empresa carolinense Elaia Zait y pretende homenajear, en esta edición, a Rafael Zabaleta, gracias a un diseño elaborado con madera de olivo con una edición limitada de 100 unidades. Las botellas se disponen verticalmente con el fondo de madera de olivo. Dentro de la caja, hay una litografía numerada original que proporciona el Museo de Quesada.

En la feria el visitante también puede adentrarse en el oleoturismo a través de los distintos municipios acogidos a la propuesta. No en vano, en cada rinconcito de la provincia existen almazaras dedicadas a la producción y venta del aceite de oliva, en cuyas instalaciones se muestran las técnicas transmitidas de generación en generación. Sabor y salud son dos factores que se conjugan a la perfección con el aceite de oliva, así que en la Feria de los Pueblos se pueden conocer otra formas menos conocidas de cuidarse el cuerpo también relacionadas con el zumo de este pequeño fruto. Hablamos de cosmética. Varias empresas cuentan con expositor propio en el que exhiben los artículos creados con el aceite de oliva como ingrediente principal. Con todo, la Feria de los Pueblos es una nueva oportunidad para que los jiennenses se den cuenta de que su tierra, bañada por un mar de olivos, es única, singular y especial, con el común denominador del preciado aceite de oliva, clave en la dieta mediterránea y cuyas bondades para la salud están más que demostradas desde el punto de vista científico.