La gran fiesta del disfraz

Es una cita remarcada en el calendario de festejos. Para muchos, es la forma de dejar los problemas a un lado para ponerle una sonrisa a la vida. Para otros, la oportunidad de interpretar un papel para hacer reír a los demás. De una manera u otra, el Carnaval es un gran encuentro que reúne a grandes y pequeños para hacerles vivir un rato agradable. Y eso mismo ocurrió en Guarromán, donde se celebró un pasacalles en el que disfraces de todos los estilos se convirtieron en la única vestimenta de los jóvenes que, junto a una charanga, recorrieron las principales calles del municipio.

Según avanzaba, los vecinos se sumaron al movimiento carnavalesco que, entre risas y música, avanzaron hasta la carpa municipal, donde se celebraron bailes y se hicieron entrega de los premios a los disfraces más originales.

De esta manera, Guarromán no quiso perder la ocasión de ver la ilusión reflejada en la cara de sus habitantes que, desde hace meses, prepararon sus trajes y algunas letras de humor. Fue un día en el que todos los participantes sacaron la mejor parte de sí mismos, y, por supuesto, invitaron a los más curiosos a dejarse llevar por el ritmo y dedicarles una sonrisa.