El robo de medicinas revela la falta de control en el Hospital
El robo de medicinas en las dependencias de la farmacia del Hospital Médico-Quirúrgico de Jaén ha puesto al descubierto evidentes fallos en los sistemas de control sobre los fármacos. Un “agujero” que, por el momento, impide determinar con exactitud la cantidad exacta de medicinas sustraídas por los dos vigilantes de seguridad y que, posteriormente, eran vendidas al propietario de un gimnasio de Torredelcampo con fines dopantes. Tal y como adelantó Diario JAÉN, los tres fueron detenidos por la Policía Nacional, acusados de delitos de robo con fuerza, receptación y contra la salud pública.
Sin embargo, las investigaciones de la Comisaría todavía no han concluido. Todo lo contrario. Siguen adelante centradas en cifrar cuántos medicamentos han sido sustraídos de las dependencias de la farmacia del Hospital en los últimos meses. En la denuncia inicial, los responsables del Complejo Hospitalario pusieron en conocimiento de la Policía que habían detectado la falta de determinados fármacos. En concreto de un anabolizante denominado “Aranesp”, que es utilizado para enfermos oncológicos. Sin embargo, también es empleado por los tramposos del deporte para doparse, con el consiguiente peligro para la salud que acarrea su uso descontrolado.
Tras detener a los dos vigilantes de seguridad —que confesaron ser los autores del robo después de ver las irrefutables pruebas contra ellos—, la Policía siguió el rastro de los medicamentos que habían sustraído. Llegaron hasta un gimnasio de Torredelcampo. Su propietario era el que adquiría los fármacos anabolizantes. Sin embargo, la sorpresa de los investigadores llegó cuando le intervinieron tres cajas de un medicamento diferente al que había sido denunciado por el Hospital. Se trata del “Omnitrope”, que sirve para tratar el cáncer y que está valorado en 572 euros, según la información oficial facilitada por la Policía.
Los agentes de la UDEV interrogaron, entonces, a la responsable de Farmacia del Complejo Hospitalario sobre este medicamento y de por qué no se había detectado su falta. Según la Comisaría, el sistema de control informático reflejaba que había almacenada una importante cantidad de esta sustancia cuando, en realidad, no había existencias en el almacén. El agujero, por lo tanto, era mayúsculo. Las pesquisas de los investigadores se centran en saber cuál es la cantidad exacta de “Omnitrope” que ha sido sustraída y, por supuesto, adónde ha ido a parar. Para ello, se ha solicitado al Hospital un informe sobre compras, almacenamiento y dispensa de este medicamento.
Además, se estudia la posibilidad de que haya más gimnasios involucrados en lo que la Policía considera “una trama”. Tampoco se descarta que se produzcan nuevas detenciones. La operación, desarrollada por la UDEV, ha causado estupor en los profesionales del Complejo Hospitalario. Su Dirección, por el momento, guarda silencio.
Sin embargo, las investigaciones de la Comisaría todavía no han concluido. Todo lo contrario. Siguen adelante centradas en cifrar cuántos medicamentos han sido sustraídos de las dependencias de la farmacia del Hospital en los últimos meses. En la denuncia inicial, los responsables del Complejo Hospitalario pusieron en conocimiento de la Policía que habían detectado la falta de determinados fármacos. En concreto de un anabolizante denominado “Aranesp”, que es utilizado para enfermos oncológicos. Sin embargo, también es empleado por los tramposos del deporte para doparse, con el consiguiente peligro para la salud que acarrea su uso descontrolado.
Tras detener a los dos vigilantes de seguridad —que confesaron ser los autores del robo después de ver las irrefutables pruebas contra ellos—, la Policía siguió el rastro de los medicamentos que habían sustraído. Llegaron hasta un gimnasio de Torredelcampo. Su propietario era el que adquiría los fármacos anabolizantes. Sin embargo, la sorpresa de los investigadores llegó cuando le intervinieron tres cajas de un medicamento diferente al que había sido denunciado por el Hospital. Se trata del “Omnitrope”, que sirve para tratar el cáncer y que está valorado en 572 euros, según la información oficial facilitada por la Policía.
Los agentes de la UDEV interrogaron, entonces, a la responsable de Farmacia del Complejo Hospitalario sobre este medicamento y de por qué no se había detectado su falta. Según la Comisaría, el sistema de control informático reflejaba que había almacenada una importante cantidad de esta sustancia cuando, en realidad, no había existencias en el almacén. El agujero, por lo tanto, era mayúsculo. Las pesquisas de los investigadores se centran en saber cuál es la cantidad exacta de “Omnitrope” que ha sido sustraída y, por supuesto, adónde ha ido a parar. Para ello, se ha solicitado al Hospital un informe sobre compras, almacenamiento y dispensa de este medicamento.
Además, se estudia la posibilidad de que haya más gimnasios involucrados en lo que la Policía considera “una trama”. Tampoco se descarta que se produzcan nuevas detenciones. La operación, desarrollada por la UDEV, ha causado estupor en los profesionales del Complejo Hospitalario. Su Dirección, por el momento, guarda silencio.