Hallan en Bedmar unas 600 piezas del Paleolítico Medio
Sabían cómo se empezaba, pero no cómo acabaría. El alcalde de Bedmar, Juan Francisco Serrano, tenía todas las esperanzas puestas, a principios de julio, cuando comenzó la aventura, en que la Fundación Instituto de Investigación de Prehistoria y Evolución Humana, dependiente del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana, localizaría en el municipio restos arqueológicos de gran importancia. Un hallazgo que permitiría poner en valor el nombre de Bedmar y generar un nuevo interés turístico. Sus anhelos se han hecho realidad y la campaña que se inició el pasado 6 de julio ha resultado ser todo un éxito.
La veintena de arqueólogos voluntarios, procedentes de diferentes puntos de España, han localizado unas seiscientas piezas del Paleolítico Medio en el yacimiento de la zona conocida como Cueva de Bedmar, un hallazgo que se considera único en Andalucía.
Los trabajos se llevaron a cabo durante los meses de verano con el objetivo de sacar a la luz los restos arqueológicos escondidos es la comarca de Sierra Mágina. Los resultados indican que en este paraje habitó un grupo de homínidos que dejaron multitud de restos y que evidencian que esta zona de la península estuvo habitada en el Paleolítico Medio, es decir, hace entre 40.000 y 100.000 años, según informó el Ayuntamiento.
El presidente de la Fundación, Cecilio Barroso, y José García, director de la intervención en Bedmar, fueron los encargados de dar a conocer a los vecinos los hallazgos, además de explicar el modo de vida y las costumbres. También profundizaron por la problemática que existe, actualmente, sobre los neandertales, que no es otro que discernir por qué desaparecieron y cómo se extinguieron estos homínidos”, tal y como explicó García durante las jornadas. Los trabajos, financiados con fondos, infraestructura y personal aportados por la Caja Rural de Jaén, el Ayuntamiento y la Fundación, han permitido descubrir piezas que, en su mayoría, son de industria lítica, o lo que es lo mismo, son las herramientas que fabricaban grupos humanos presumiblemente en el Paleolítico Medio, una cultura musteriense que está asociada a los Neanderthales, para cazar principalmente. Entre los restos más destacables, figuran puntas de lanza y de proyectil. El Instituto de Investigación de Prehistoria y Evolución Humana trabaja, ahora, en catalogar y estudiar los restos para lograr una datación precisa.
“Restos de este tipo son bastante escasos en la Península. En España puede que no lleguen a una treintena y en Andalucía son muy pocos los yacimientos que estén excavados con metodología científica moderna”, explican los arqueólogos. En el caso de Jaén, prácticamente es el único, junto a unas terrazas que se excavaron en la zona de Alcalá la Real, pero, allí, no se evidenciaron que fuera un hábitat.