Macron y Merkel lanzan un alegato contra el populismo

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, y la canciller de Alemania, Angela Merkel, firman un nuevo tratado de amistad con el que aspiran a hacer frente a los nuevos desafíos, entre los cuales han citado el auge del populismo y el nacionalismo en Europa. El Tratado de Aquisgrán, como se ha bautizado a este nuevo acuerdo, tiene como meta ahondar en la reconciliación histórica cimentada hace exactamente 56 años, cuando el Tratado del Elíseo sirvió en 1963 para acercar a ambos países tras la Segunda Guerra Mundial.

Entre los aspectos en los que París y Berlín quieren estrechar lazos figuran cuestiones de índole económica, política exterior, seguridad, educación, cultura, investigación y medio ambiente, aunque sirvió también para presentar a Merkel y Macron como aliados políticos clave en un escenario convulso dentro de la UE. Merkel ha advertido durante su discurso del crecimiento de “los nacionalismos y el populismo” en todo el mundo, con el riesgo que ello conlleva para el “multilateralismo”. La canciller abogó por dar “una nueva orientación” a la cooperación francoalemana precisamente para luchar contra estos nuevos desafíos. Macron también ha considerado “indispensable” la alianza entre los dos países vecinos y ha abogado por ampliar estas iniciativas, “porque ningún éxito europeo se puede construir de forma aislada”.