Choque de asociaciones vecinales en el casco antiguo

Tres colectivos coexisten en Faldas del Castillo y los barrios limítrofes denuncian injerencias del más joven

23 feb 2017 / 12:17 H.

En el casco antiguo, afilan cuchillos. ¿El motivo? El conflicto de intereses territoriales que resulta de la sopa de colectivos vecinales que ha germinado en los últimos años en las Faldas del Castillo, como respuesta a la “inactividad” de la asociación homónima, la única reconocida por el Ayuntamiento hasta la fecha. Fruto de esa “inacción” fue el nacimiento de “La Muralla de Jaén”, en mayo de 2013, y, a principios de 2016, “Vistas al Castillo”.

El motivo que las guía a ambas es luchar por mejorar la zona. Sin embargo, sus buenas voluntades chocan con el reglamento que regula el Registro General de Asociaciones, que dicta que no puede haber más de un colectivo para cada barrio, a excepción de las zonas de expansión, y eso “de forma consensuada con las federaciones de vecinos”. Pero, además, las diferencias entre las tres asociaciones y, sobre todo, la lectura territorial que “Vistas del Castillo” hace de lo que deberían ser los límites del barrio tiene de uñas también a los colectivos de los barrios colindantes (San Juan y La Magdalena). Denuncian “injerencias” y se preguntan por qué, en vez de “ir a su bola”, no se une a ellas, si los fines —coinciden todas— son los mismos: mejorar la situación de la que dicen que es la “zona más desamparada de la ciudad”.

El secretario de “Vistas al Castillo”, Francisco Jesús Castro, y la presidenta de “La Muralla”, Matilde Liébanas, señalan que, en su día, tuvieron contactos para unir fuerzas. Pero no cuajaron. Siguiendo los consejos de “OCO” y con el ánimo de “hacer las cosas bien”, Liébanas propuso al colectivo naciente incorporarse a “La Muralla” y, a continuación, “un proceso de elecciones”, asegura. “No quisieron. Lo que pretendían era disolver mi asociación, que nosotros nos hiciéramos socios de la suya y ellos llevar el timón, sin elecciones. ¡Y no acepto!”, exclama Liébanas, que ha llegado a un acuerdo con la presidenta de “Faldas” para trabajar de forma coordinada con la promesa por parte de esta de que, después de 22 años, por fin habrá elecciones en la asociación. “Vistas al Castillo” no se lo cree y, además, no está dispuesta a llegar a acuerdo alguno con “Faldas” mientras Mari Ángeles Ordóñez siga al frente. “Ha dicho que no se va a ir del cargo en la vida y, como tiene el respaldo del Ayuntamiento, porque es del PP, ahí está”, esgrime Castro, que, sobre “La Muralla”, dice: “Que venga y que se una a nosotros, que se supone que queremos lo mismo”. El secretario de “Vistas al Castillo” justifica este movimiento en que cuentan con más socios que los otros dos colectivos juntos: 120. Indica que ha habido dos intentos y siguen “abiertos”. Coincide con Liébanas en que 3 asociaciones para un mismo barrio es “una locura”, y apunta: “Si pudiésemos hacer elecciones, lo mismo iríamos con ‘Faldas del Castillo”. Pero esos comicios deben estar garantizados, dicen.

El edil de Participación Ciudadana, Manuel Heras, intentó mediar para que se unieran. “Sería lo mejor por el bien de los vecinos, pero no quisieron”, lamenta el concejal, que subraya que “lo mejor es que lo hablen entre ellas” y lleguen a un acuerdo. Este periódico intentó sin éxito conocer la versión de “Faldas del Castillo”.