Condenados por arrancar un trozo de oreja de un mordisco

Tres años de cárcel para el autor material y un año y medio para su hermano

11 ene 2017 / 13:55 H.

La Audiencia Provincial ha condenado a penas de cárcel a dos hermanos de Torredonjimeno como autores de un delito de lesiones graves. Ambos agredieron a otro vecino del pueblo durante una pelea a las puertas de una discoteca. En el transcurso de la reyerta, la víctima sufrió la amputación de parte de la oreja derecha a consecuencia de un mordisco. Los magistrados de la Sección Tercera han considerado que Jesús G. L. fue el autor material del bocado. Por ello, le imponen un castigo de tres años de prisión, lo que conlleva el ingreso efectivo en un centro penitenciario. La sentencia recoge que su hermano Miguel Ángel lo ayudó y, por eso, es considerado cómplice de la agresión. En ese sentido, la condena que se le impone es menor, en concreto, de un año y medio de cárcel.

Los hechos se remontan a las cinco de la mañana del 1 de febrero de 2015, en un establecimiento nocturno ubicado en la carretera de Jaén a Torredonjimeno. La resolución judicial explica que los dos condenados se encontraron con la víctima en las puertas de la discoteca. Nada se dice si estaban previamente enfrentados ni tampoco cuál fue la chispa que hizo saltar la pelea. Tan solo se relata que los dos hermanos comenzaron a propinarle diversos golpes por el rostro y el cuerpo. El resultado, además de los hematomas, fue que el perjudicado presentaba una mordedura con arrancamiento del pabellón auricular derecho.

En el juicio, celebrado el pasado 12 de diciembre, los dos procesados se declararon inocentes. Miguel Ángel G. L. explicó que fue la víctima la que, sin mediar palabra, se acercó a su hermano y, por sorpresa, le estalló un vaso en la cara. Según su relato, ambos acabaron en el suelo: “Yo lo único que hice fue coger a mi hermano y llevármelo de allí, porque ya le estaban increpando y arrojando objetos”, aclaró, entonces, ante el tribunal. Jesús G. L., el presunto autor del mordisco, también negó las acusaciones. Aseguró que recibió un “vasazo” y que cayó al suelo encima del denunciante.

Sin embargo, para el tribunal, estas versiones carecen de consistencia y tienen poca credibilidad, ya que no explican cómo el perjudicado pudo sufrir la amputación de parte de la oreja. La sala se apoya en los informes forenses que acreditan que esa grave herida se produjo como consecuencia de un mordisco y que fue Jesús G. L. el que se lo propinó, con la ayuda de su hermano.

Por ello, condena a ambos como presuntos autores de un delito de lesiones graves con deformidad. La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante el Tribunal Supremo. Por eso, mientras tanto, el condenado a tres años de prisión no tendrá que ingresar en la cárcel.

Compensación de 25.000 euros

Además de la autoría de los hechos, lo que se discutió en el juicio fue la compensación económica que debía recibir la víctima por la amputación de la oreja derecha. La Fiscalía reclamó 17.000 euros, mientras que la acusación particular solicitó 40.000. Finalmente, el tribunal ha estimado conceder al perjudicado una indemnización de 25.000 euros, en la que se incluye el daño moral.