Disturbios de Peal de Becerro: mensaje ante el antigitanismo
TRIBUNA
Desde la Federación de Asociaciones de Mujeres Gitanas Kamira y la Asociación de Mujeres Gitanas Sinando Kalí volvemos a expresar nuestra más absoluta repulsa y nuestra más profunda consternación por el homicidio del joven Álvaro Soto, en Peal de Becerro, el 17 de julio del año 2022. Confiamos en que habrá justicia para el joven Álvaro y su familia cuando se dicte la sentencia del juicio contra el presunto culpable que se celebra desde el pasado 22 de abril.
Además, creemos necesario extender este reclamo de Justicia para las familias gitanas que sufrieron actos de violencia racista en el contexto de las protestas tras el crimen en julio de 2022. Recordamos con pesar que, tras estas protestas, un numeroso grupo de radicales se dirigieron a las viviendas donde vivían familias gitanas al grito de “asesinos”, volcaron algunos de sus vehículos y quemaron una de sus viviendas. Que dichas familias no tenían ninguna relación con el crimen más que compartir la misma etnia del presunto agresor. Estas familias fueron violentadas y amenazadas únicamente por ser gitanas.
Como resultado, siete familias tuvieron que abandonar el municipio por no poderse garantizar su seguridad por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Hoy en día, estas familias siguen desterradas de su pueblo, sin poder acceder a sus viviendas ni recoger sus pertenencias. Numerosos menores tuvieron que abandonar las escuelas e institutos sin haber podido regresar hasta la fecha.
Que estos actos sufridos por las familias gitanas de Peal de Becerro son constitutivos de delitos de odio y suponen un atentado al derecho fundamental a la igualdad de trato y la no discriminación, por lo que seguimos reclamando Justicia para estas familias, que estos actos no queden impunes y se juzgue a los responsables. La impunidad de estos actos es una puerta abierta para el aumento del odio anti gitano.
Seguimos solicitando a la Subdelegación del Gobierno de Jaén, al Ayuntamiento de Peal de Becerro y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que, en el ejercicio de sus funciones, adopten todas las medidas necesarias para evitar el pogromo anti gitano y garantizar el derecho a la igualdad de trato y no discriminación de estas familias gitanas, que han salido del pueblo por temor a las represalias, y puedan volver a sus casas y que se restaure la convivencia pacífica. (Lo que es inadmisible en el siglo XXI es que se utilice la guerra de guerrillas entre vecinos de un mismo pueblo, como impedir que una familia gitana pueda comprar el pan, que pueda ir a hacer la compra a un supermercado porque le niegan la entrada, o que pueda seguir ejerciendo su trabajo como vendedores porque le niegan el ejercicio de su profesión sin haber cometido ningún delito, solo por ser gitanos).
A los medios de comunicación y a la sociedad civil pedimos que hagan suyo este mensaje contra el odio racista y la defensa de los derechos fundamentales, que se posicionen contra los discursos que puedan fomentar el odio y la intolerancia y que entiendan la causa del anti gitanismo como un compromiso firme en defensa de la democracia. Sin la paz entre ciudadanos, se dificulta la convivencia y la inclusión como españoles, porque España también es gitana, y la provincia de Jaén mucho más.
(*) María del Carmen Carrillo Losada, Presidenta de la Asociación de Mujeres Sinando Kalí.