El Camarín hace más eficiente y ornamental su iluminación

La Cofradía abarata el mantenimiento en la “casa” de Nuestro Padre Jesús

08 ago 2017 / 10:21 H.

La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Jaén, una de las principales de España, tiene entre sus labores, además de velar y fomentar la devoción de su titular, el cuidado de su rico patrimonio, con un gran significado para los fieles de la ciudad y buena parte del país. Una de las últimas acciones emprendidas en este ámbito de trabajo fue la renovación de la iluminación del Camarín de Jesús, la “casa” de la popular imagen de El Abuelo, en pleno casco antiguo, un templo que, además de valores históricos y artísticos, es un lugar de encuentro para todos los devotos, con un importante trasiego a diario. El administrador de la hermandad, Manuel Escudero, explica que, conforme a otras obras ya acometidas, se renovó la iluminación de la fachada y la lonja de la capilla, con la sustitución de las bombillas convencionales, menos eficientes y que ya comenzaban a fallar, por luces de las denominadas led, que gastan menos y alumbran más. De esta forma, se busca realzar la visión de lo que fuera parte del convento de San José, además de esta figura en concreto. Al mismo tiempo, la cofradía aprovechó para eliminar algunos elementos que restaban belleza al monumento, tal y como apunta Manuel Escudero.

La instalación de lámparas led está en la línea de otros trabajos ya acometidos en este lugar de culto, con la idea de abaratar costes y hacer este espacio más sostenible y respetuoso con el medio ambiente. De paso, se gana en vistosidad y, de nuevo, al recuperar potencia las bombillas, el Camarín de Jesús vuelve a ser visible desde el Castillo de Santa Catalina, el punto más alto del casco urbano de la capital.

El Camarín y la iglesia de San José son los únicos vestigios que quedan del antiguo Convento de San José de los Padres Carmelitas Descalzos, fundado en el siglo XVI, tal y como informa Turjaen. El templo presenta una típica fachada carmelitana con hornacina, acoge la capilla y camarín de Jesús, concebidos en el siglo XVII para albergar la famosa talla renacentista de Nuestro Padre Jesús Nazareno, perteneciente a la Cofradía fundada en ese mismo convento de San José en 1588 y que procesiona en la madrugada del Viernes Santo ante miles de fieles y devotos. En su fachada luce una bella escultura de San José, realizada en terracota por Paco Tito. Este sitio histórico se encuentra en el número 35 de la calle Carrera de Jesús, en el Barrio de La Merced, y está dentro de un recorrido monumental que comienza en la santa iglesia Catedral y continúa entre caserones nobles, el monasterio de Santa Teresa de Jesús de las Carmelitas Descalzas, el lienzo de las antiguas murallas y el torreón del conde de Torralba. Las obras de rehabilitación y restauración de este espacio, que se encontraba en muy mal estado y que obligaron a que la imagen estuviera en la seo jiennense, comenzaron el año 2006 y se prolongaron hasta mayo de 2009, dirigidas por el arquitecto José Miguel Rueda Muñoz de San Pedro. El edificio fue cedido por el Ayuntamiento a la Cofradía. De aquella época es la iluminación que, recientemente, fue sustituida por led.