El rincón con más fortuna de la Plaza de San Francisco

El lotero Miguel Ángel Hurtado sube las ventas tras repartir 3,6 millones de euros en la Bonoloto el lunes

13 feb 2019 / 12:08 H.

En la portada de una revista del corazón, de las que vende Miguel Ángel Hurtado en su kiosco de la Plaza de San Francisco, la pareja de Cristiano Ronaldo, Georgina Rodríguez, dice que se va a sincerar, que atraviesa un momento muy complicado de su vida. Es una noticia insignificante, mucho más si se la compara con la que protagoniza el propio kiosquero que, el lunes, vendió un boleto de la Bonoloto que vale más de 3,6 millones de euros. El comprador pagó un euro, recuerda, aunque no sabe de quien se trata. Una clienta le intenta sonsacar y Hurtado le contesta: “Si fueras tú, ¿se iba a enterar alguien”. Le responden que no. —Y si le hubiera tocado a usted, ¿que es lo que haría? “Cerraba y le daba las llaves del chiringuito al primero que las quisiera, ni siquiera me paraba a venderlo”, asegura con humor. “No me ha tocado nunca nada”, aclara, ya más serio, aunque mano para atraer la fortuna tiene. En 2016 ya selló un boleto que obtuvo un premio superior a los 12 millones de euros. “Le tocó a un hombre que vive por el centro, pero no he vuelto a verlo, se habrá quitado del medio”, confesó. Mientras responde a las preguntas llega una clienta que, al comprobar si le ha tocado algo en el sorteo, recibe la buena nueva de que le han caído 16 euros. Reinvierte en parte en los juegos de azar y juzga: “Esto es un no parar”.

Por el céntrico punto de venta de prensa y loterías pasaron, ayer, según los cálculos de Hurtado, un 20% más de clientes. “Repartir buenos premios tiene un efecto llamada inmediato. Estoy muy contento y orgulloso”, reflexiona. “La primera vez que di mucho dinero fueron 20 millones de pesetas. No me invitaron ni a una cerveza”, deja claro este lotero que atrae a la suerte.