Inseguridad para aparcar

Los vecinos del barrio de San Felipe vivieron días de caos a la hora de estacionar sus vehículos, al igual que otros de la capital de la provincia, a causa de la Semana Santa. Sin embargo, a sus problemas cotidianos se suma el hecho de que el lugar pensado específicamente para que los residentes dejen sus coches no es “seguro”. Así lo denuncia José Torres, presidente de la asociación Ariete. Hace referencia a un solar ubicado junto a la zona de los depósitos, cerca de la carretera de Circunvalación. El proyecto inicial preveía la construcción de un campo de fútbol con césped, pero las circunstancias económicas, según comenta el dirigente vecinal, instaron al Ayuntamiento a cambiar el plan por un aparcamiento.

Desde “Ariete” señalan que se sienten “abandonados”, pues a pesar del tiempo sigue sin haber solución “clara” para el terreno que parece estar “de obras”. Los usuarios que se deciden a dejar su vehículo ahí se encuentran con suelo sin asfaltar, baches y hundimientos, sin delimitar las zonas de estacionamiento ni marcas similares. “Nos habilitaron unas torretas de luz para que iluminaran el lugar y no fuera tan oscuro”, apunta Torres, que aun así lo ve “insuficiente”, pues no aleja a los posibles “ladrones”. “Si quieren, no tienen más que acercarse a los coches que están en los rincones y hacer lo que quieran, porque cerca no hay ningún edificio ni dispositivos de seguridad que adviertan a la gente de lo que está ocurriendo realmente ahí”, afirma. De hecho, hace menos de un mes uno de los residentes denunció que le habían robado las cuatro ruedas de su coche. “Lo dejaron limpio”, comenta Torres. Otros vecinos informaron a la asociación Ariete que también habían sido víctimas de hurto. José Torres explica que algunos conductores, al ir a coger su vehículo, se encontraron con “ralladuras” en la carrocería y, en casos más graves, las puertas abiertas. “Seguramente no hallaron nada que llevarse y dejaban el coche como estaba”, apunta el presidente de “Ariete”.

Desde la asociación resaltan el “miedo” con el que viven los residentes al aparcar ahí. “Si estos días festivos era de por sí complicado encontrar un lugar donde estacionar el coche, ahora ha sido mucho peor”, asegura, y aunque reconoce que todos los barrios tienen problemas, “con vehículos subidos a las aceras o donde puedan dejarlos sin molestar”, la posición cercana a la Plaza de Santa María “incrementa los inconvenientes de los vecinos”.

SOLUCIÓN. Según José Torres, lo “ideal” es que se “cierre” el aparcamiento. El presidente sugiere poner vigilancia para que, al menos por la noche, “se pueda dormir tranquilo” y sin preocuparse de lo que pueda ocurrirle al vehículo. “La Policía Municipal no pasa por ahí a menos que se adentren por algún caso en concreto, así que los coches están completamente desprotegidos”, indica.