La lumbre de San Antón más deseada

El día de San Antón, protector de los animales, se celebró, finalmente, con una lumbre conmemorativa. Sin embargo, en lugar de hacerse en la parroquia de San Juan, donde se ubica físicamente la imagen del patrón y tal y como se propuso desde la Plataforma San Antón en Sábado, la celebración fue en El Salvador. Además de la eucaristía y de la bendición de los animales, en la plaza de la iglesia la Cofradía de La Amargura prendió una lumbre simbólica para representar la tradición de este día en la capital. Tampoco faltaron los melenchones con los niños de la Asociación Lola Torres.

Pero, ¿por qué se hizo, al final en esta parroquia y no en la prevista desde el principio? La explicación derivó en una polémica entre la presidenta de la Asociación de Vecinos Torre del Concejo, del barrio de San Juan, María Ángeles Barranco y el portavoz de la plataforma, Antonio Lechuga. Según cuenta el representante de “San Antón en Sábado”, su intención era que se organizara una lumbre conmemorativa el día 16 en la iglesia de San Juan. “Estamos de acuerdo con respetar la tradición, por eso queremos ampliar los días de la celebración, para no perder la costumbre. De hecho, mi intención era recuperar la talla de San Antón que, en la actualidad, no se puede ver”, explica Lechuga. Asimismo, achaca la responsabilidad de que no se haya podido organizar en San Juan a la presidenta de la asociación vecinal, María Ángeles Barranco. “Esa señora no ha hablado conmigo y no me contestó a las llamadas que le hice. Además, a miembros de la plataforma le llegó a decir que no quería hacer la lumbre”, cuenta el portavoz. Según cuenta Antonio Lechuga, buscó al párroco de San Juan al Obispado para proponerle su idea. “Le pareció bien, pero dijo que como la presidenta de la asociación de vecinos no quería, prefería no meterse en conflictos y por lo tanto no se haría”, indica el representante.

Sin embargo, la presidenta de “Torre del Concejo” desmiente que se negara a realizar la lumbre en San Juan. Es más, añade que, desde que se propuso celebrar ahí la festividad, le pareció “estupendo”. “Luego se decidió que se iba a hacer en El Salvador, pero no nos dijeron nada ni nos llamaron cuando fueron al Obispado. Nos acusan de algo que no es cierto”, insiste Barranco, quien subraya: “Yo no soy quien para prohibir a nadie hacer una lumbre simbólica. Es absurdo”. Además, destaca que con ella no habló la parroquia. “El párroco dice que no la pueden hacer porque yo no quiero. A lo mejor, los verdaderos motivos están en El Salvador”, deja caer Barranco. Asimismo, en su argumentación, la representante vecinal recuerda que, desde un principio, se mostró a favor de que la lumbre se realizara el día 16. “Así lo manifestamos cuando nos sumamos a la solicitud que envió la federación vecinal OCO al Ayuntamiento y que, luego, nos denegó”, explica María Ángeles Barranco.

No obstante, para Antonio Lechuga, esta última justificación de la presidenta no es válida, ya que insiste en que tendría que haber solicitado la lumbre ella sola como asociación de vecinos. “Al hacerlo conjuntamente no era posible, ya que era solo una conmemorativa la que organizaba el Ayuntamiento”, dice Lechuga. En cualquier caso, el portavoz de la plataforma añade que, lo ocurrido este año —“ha sido falta de comunicación, pues podemos llegar a entendernos”, dijo—, no implica que el próximo año no se pueda celebrar en la iglesia de San Juan. Por su parte, el concejal de comunicación, Miguel Contreras, explicó que, tras contar con el ofrecimiento de varias parroquias, optaron por la de El Salvador. “No fue por nada en especial”, dijo, para manifestar su satisfacción por el éxito de la fiesta en cuatro días.