Las obras para el paso peatonal a Flores de Lemus, menos lejos

El Ayuntamiento adjudica el proyecto, que es una histórica reivindicación vecinal

09 abr 2019 / 11:34 H.

La Comisión de Urbanismo aprobó, hace casi un año, el informe que da luz verde a la expropiación del terreno preciso para abrir un vial entre la calle La Luna y Flores de Lemus. El importe necesario para convertir en público el suelo, que está dentro de un residencial, asciende a 112.000 euros. Al dar este paso, el Gobierno local dijo que respondía a los compromisos adquiridos con los vecinos de la zona, que demandaban la apertura de esta arteria que les integra en el barrio. A principios de este siglo, ya se organizaron concentraciones para lograrlo y el presidente de la Asociación de Vecinos Loma del Royo, Francisco Céspedes, asegura que envió 30 cartas al Gobierno local para lograrlo. Javier Márquez, el actual alcalde y en el cargo desde 2015, ya fue objeto de estas misivas en su etapa como concejal de Urbanismo. Las obras ya están adjudicadas, como explicó el concejal de Hacienda, Manuel Bonilla, que cree que, en dos o tres semanas, los trabajos puede comenzar.

El motivo de la demanda ciudadana no es otro que la pretensión de los vecinos de evitarse un “rodeo absurdo” para ir de la calle La Luna hacia la Avenida de Madrid. En esta última arteria hay servicios que usan prácticamente a diario, desde el centro de mayores a los centros educativos, sin contar con la gran cantidad de comercios que hay allí. Franquear este paso está contemplado en tres planes generales de ordenación urbana distintos, en 1988, en 1996 y en el de 2014. Lo que ocurre es similar a la situación que se da en el Polígono de El Valle, ya que todavía está por solventar la cuestión de la titularidad de las plazas y otros espacios públicos en torno al Paseo Virgen del Rocío y alrededores. Con la apertura del vial hacia Flores de Lemus lo que se logra es convertir en público un suelo que es privado, que es lo que demanda para El Valle también la asociación Passo.

En el caso de la calle La Luna, la expropiación para la apertura del vial fue ya aprobada en el pleno municipal del 11 de octubre de 2002, con su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia del 17 de enero de 2003, pero el proceso se archivó. No fue hasta el 30 de mayo de 2016 cuando se aprueba por unanimidad una moción en el pleno de la Corporación en la que se da luz verde a la creación de la calle y a habilitar una partida presupuestaria para la expropiación. En cuanto a la obra en sí, se trata de abrir un pasillo de menos de seis metros de ancho, la mitad para el paso de coches y ochenta de largo. Los técnicos municipales también se mostraron favorables a la construcción de un muro que divida la urbanización que hay que atravesar y el paso peatonal que se tendrá que abrir. Al incombustible Francisco Céspedes este logro como presidente vecinal le pilla ya de salida en el cargo. El motivo es que el veterano representante vecinal deja el cargo, a favor de María Arévalo, que asume la presidencia, tras ganar las elecciones convocadas. Aunque él continúa en la junta directiva, ya deja la primera línea del movimiento vecinal.