Los descubrimientos sobre la salud impulsan el consumo

El aceite coge el aval de grasa saludable para crecer fuera del Mediterráneo

07 may 2017 / 10:51 H.

En España hay costumbre de usar el aceite de oliva. También en Italia, en Grecia o en Túnez. En cambio, cuanto más lejos está el país del Mar Mediterráneo, más difícil es vender el producto, simplemente, porque no se conoce. Sus habitantes están acostumbrados a cocinar con otras grasas y cambiarle el hábito no es sencillo, salvo que sea con argumentos muy potentes. Quizá uno que resulta irrebatible radica en que el aceite de oliva es la grasa más sana del mundo. Además, detrás de él existe un glosario de estudios científicos que lo avalan.

La investigación más potente es el Predimed-Plus. Se trata de un ensayo multicéntrico, aleatorizado, de prevención primaria cardiovascular en hombres (55-75 años) y mujeres (60-75). Los participantes se aletorizarán en dos conjuntos. Existe un “Grupo control”, que consiste en una intervención similar a la realizada en el estudio Predimed-1, con dieta mediterránea suplementada con aceite de oliva virgen extra y frutos secos, sin restricción calórica ni promoción de actividad física ni objetivos de pérdida de peso.

El otro es el “Grupo de intervención”, que consiste en una atención intensiva basada en el consumo de una dieta mediterránea hipocalórica (con una restricción calórica del 30%) suplementada con aceite de oliva virgen extra y frutos secos, además de un programa intensivo de estilo de vida con promoción de actividad física (45 minutos de caminar al día o equivalente) y objetivos de pérdida de peso que incluyen terapia conductural.

El objetivo primario final es una combinación de eventos clínicos cardiovasculares mayores (infarto, ictus o muerte cardiovascular), es decir, ver si una dieta basada en aceite de oliva y frutos secos cuentan con menos accidentes cardiovasculares. El tamaño de muestra final es de 6.919 participantes. Precisamente, el reclutamiento de los participantes se inició en septiembre de 2013 y finalizó en diciembre de 2016. Los resultados finales estarán disponibles a partir de 2020.

Con el estudio Predimed-1 se demostró una reducción del 30% en el riesgo de infarto, embolia o mortalidad por enfermedad cardiovascular. Ahora, sumando la promoción de actividad física y los objetivos de pérdida de peso, es de esperar que esta reducción del riego incremente. Se trata de un estudio tremendamente interesante, en el que participa la Universidad de Jaén y también la Diptuación Provincial. Sin duda, si los resultados son los esperamos, será un argumento más para aumentar las ventas de aceite.