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El Consejo de Patrimonio Histórico, reunido, ayer, en la ciudad asturiana de Avilés, decidió respaldar las candidaturas al título de Patrimonio Mundial de la Unesco para nombrar Bien de la Humanidad los “Paisajes del olivar de Andalucía”. “Este es el primer paso para que puedan ser considerados Patrimonio Mundial”, resumió la vicepresidenta primera de la Diputación, Pilar Parra, que fue la encargada de presentar la candidatura ante el consejo, que se celebró en el Centro Cultural Internacional Óscar Niemeyer.

Parra no pudo contener su “satisfacción”. “Hemos concurrido por primera vez ante el Consejo del Patrimonio Histórico y hemos logrado nuestro objetivo”, destacó la vicepresidenta primera de la Diputación, que recordó que se han realizado “trabajos previos muy intensos” que han posibilitado que la propuesta “haya sido merecedora” de ser incluida en la lista española.

No fue la única propuesta que consiguió su inclusión en este listado. También lo logró la iglesia de San Salvador de Valdediós, que se integraría en el conjunto del Arte Prerrománico Asturiano, que ya goza de protección. La pregunta ahora es cuándo se presentarán ante la Unesco y la respuesta es que no hay fecha prevista porque todavía queda una veintena de peticiones que esperan su momento. “El tiempo dependerá de cómo consideremos las otras candidaturas. Algunas llevan años (en la lista)”, señaló el director general de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes, Miguel Ángel Recio, que indicó que las próximas que llevarán a la Unesco serán la del conjunto de Medina Azahara, “cuyo expediente está muy avanzado”, y la de las fiestas de las Fallas de Valencia, informó Europa Press.

“El visto bueno de este órgano supone que tenemos la puerta abierta por parte de la Subdirección General de Protección de Patrimonio Histórico para seguir trabajando en este expediente”, explicó Parra, que apuntó que se tendrán en cuenta “todas las consideraciones” que se han hecho a la propuesta para que lo que consideró una “aspiración de la provincia, de la que se ha hecho eco la Diputación, se convierta en una realidad”. En su exposición ante el Consejo de Patrimonio Histórico, la dirigente provincial es un paisaje cultural “paradigmático”. “Integra perfectamente lo material y lo inmaterial y ha generado así un paisaje prototípico, como podemos ver en nuestra propia provincia el mar de olivos, cuyas líneas se extienden hasta el infinito, y comprende un increíble e impresionante patrimonio arquitectónico, artístico, histórico, etnográfico, arqueológico e industrial”.