Moreno dará la batalla por un líder del PP a tiempo completo

En una provincia que fue epicentro del mundo ibero, un guerrero de piedra calcarenita blanca simboliza parte de la riqueza de ese legado. Se le conoce como el guerrero de Porcuna. Y, aunque median 26 siglos entre ambos y Miguel Moreno no lleva coraza y ni mucho menos es de roca, tendrá que luchar como si lo fuera para intentar apear a José Enrique Fernández de Moya de la Presidencia del PP de Jaén, después de 16 años y el anuncio de que volverá a optar a la reelección. Con una puesta en escena muy pensada, a las puertas de la Diputación y rodeado de 13 de los 25 alcaldes que tiene el PP en los municipios jiennenses, además de concejales, el regidor de Porcuna defendió una alternativa que, con un respeto “casi reverencial” hacia el presidente actual, ambiciona “trabajar por la provincia” desde un proyecto “de renovación, democratización de la vida interna del partido y, sobre todo, de apoyo a los municipios”. “No se trata de un ‘quítate tú, para ponerme yo” —aseguró Moreno— y tampoco de “plantear una disputa”. “Se trata —aclaró— de que la participación de la militancia sea real; de que pueda participar en las decisiones relevantes del partido y, si alguien aspira a desempeñar un puesto en el partido, que pueda hacerlo y que lo decidamos entre todos”. Esgrimió que se está produciendo un cambio de ciclo político en la sociedad. Las formaciones políticas, incluido el PP, se jactan de democracia interna. Por eso, según Moreno, es el momento de predicar con el ejemplo y subirse “al carro de la democratización” y de la “provincialización del PP” desde un proyecto que representa una “renovación completa” respecto a la actual dirección provincial.

No es una enmienda a la totalidad de la gestión de Fernández de Moya. En el PP de Jaén, “se han hecho las cosas razonablemente bien en este tiempo”, valoró. Pero el objetivo es reforzar las estructuras locales, “provincializar” el partido y, a continuación, hacerse con el poder de la Diputación. Y para aspirar a eso, según Moreno, el PP necesita un presidente “a tiempo completo en la provincia”. “No queremos un presidente en las alturas, ni en la distancia, sino con los pies en el suelo, que ande por la provincia y cercano a la gente; que se siente con las personas y conozca verdaderamente los problemas de Jaén, y el tiempo es un factor imprescindible”, respondió, aludiendo subrepticiamente a Fernández de Moya, que comparte el liderazgo del partido con la Secretaría de Estado de Hacienda. La batalla no será fácil. A Moreno no le son ajenos movimientos internos para “debilitar, dividir o consensuar” con su proyecto. Pero se mostró confiado en que “el aparato se mantenga neutral” y orgulloso del bagaje político que lo avala, como líder local del PP de Porcuna desde 2001, y como alcalde de un Ayuntamiento que, con él, ha pasado de la ruina a una deuda financiera viva “a cero”.