Pequeños comerciantes quieren ser “proveedores” de Asuntos Sociales

Quejas porque se deriva a los usuarios a una gran superficie

21 may 2016 / 11:22 H.

Un pesar reconcome a los pequeños comerciantes del casco histórico. Desde hace “dos o tres meses”, las personas con dificultades económicas o en riesgo de exclusión social que se benefician de la ayuda que ofrece el Patronato de Asuntos Sociales para hacer la compra no acuden a sus establecimientos. Aseguran que se les está derivando a una gran superficie comercial. Y esto —argumentan, con un malestar declarado— no solo repercute en sus pequeñas tiendas de barrio, que están aguantando a pulmón el impacto de la crisis. Advierten del efecto sobre la bolsa de la compra de los propios usuarios del Patronato de Asuntos Sociales.

“Hasta tres personas me han llegado diciendo que ya no podían comprarme a mí, ni al tendero de más arriba”, indica Juan Carlos López, desde la Droguería Rosales, en la calle Martínez Molina. Cuenta que la primera fue una mujer que le explicó que era porque “no da facturas”. “Sí facturo y, de hecho, lo hago a la Delegación de Educación, pero ellos quieren un sello y lo normal sería que los asistentes sociales presenten los gastos, ya que son quienes les dan el dinero a estos usuarios”, aduce el comerciante. Días después, llegó otro cliente a la droguería. “Más o menos me compraba y me debe dinero y me dijo que si, en un tiempo, no venía era porque le han dado un vale para una gran superficie”, le informó, explicándole, además, de que había hecho la cuenta en su casa y había encontrado una diferencia “de 80 euros más” respecto a lo que antes le costaba la cesta de la compra. “Se lo dijo a la asistente, porque con esos 80 euros se podría haber llevado otro carro y tirado para adelante un mes y medio”, relata López.

La propuesta que la Federación de Vecinos Objetivos Comunes (OCO) elevará al próximo consejo rector del Patronato de Asuntos Sociales pretende que estos pequeños comerciantes vuelvan a convertirse en proveedores, receptores de estos cheques. “Y, si el Patronato da el visto bueno, celebrar una reunión con los comerciantes”, sugiere la presidenta de OCO, María Cantos. “Yo no quiero que los 100 vales que reparten vengan a mi tienda, pero si son 10 o 15, buenos son. Eso es apoyar el pequeño y mediano comercio con hechos”, recalca el comerciante.