Un cazador pierde la vida en Santisteban
La Benemérita investiga las circunstancias de la muerte, atribuida, conforme a la hipótesis inicial, a un accidente
La Guardia Civil investiga las causas y las circunstancias en las que murió un cazador en la finca Mirabueno, en el término municipal de Santisteban del Puerto. El cuerpo sin vida del hombre, un vecino de treinta y cuatro años identificado como Juan Pedro L. Q., fue hallado hacia las nueve de la noche del sábado. Presentaba un disparo de escopeta a la altura del pecho. El fallecido había acudido hasta la explotación para practicar la caza de perdiz con reclamo en un puesto natural de ramas y maleza. El paraje de vegetación adehesada y monte bajo se localiza a unos cinco kilómetros del casco urbano santistebeño, en el entorno de la carretera que se dirige hacia Navas de San Juan.
De acuerdo con las fuentes, todo apunta a que el suceso se debió a causas accidentales, de manera que el arma pudo dispararse de manera fortuita, probablemente por una caída en el puesto. La autopsia permitirá conocer los detalles del luctuoso asunto. Habitantes de Santisteban del Puerto indican que la familia, al notar la ausencia de Juan Pedro L. Q. se desplazó hasta el lugar y lo halló sin vida. En el momento en el que se produjeron los hechos, el hombre se encontraba solo en la explotación rústica.
El funeral está previsto para las doce de este mediodía en el templo de la ermita del municipio de El Condado. Los habitantes de Santisteban están desolados, ya que se trataba de un vecino muy conocido, igual que su familia. Soltero y sin hijos, Juan Pedro L. Q. era un amante de la actividad cinegética y solía trabajar en el campo a lo largo del año.
La caza mediante reclamo, conocida popularmente como “cuco”, consiste en la colocación del cazador en un apostadero desde donde espera la llegada de perdices, atraídas por el canto de un ejemplar colocada generalmente dentro de una jaula. Se trata de una modalidad que solo puede practicarse algunos meses.