Un joven herido por un toro lucha por conservar la pierna

Es una historia muy dura. José Manuel Soto pelea en una cama del Hospital Médico-Quirúrgico de Jaén para poder volver a caminar. Todavía no sabe si podrá conservar la pierna derecha después de que un toro se la destrozara en un festejo en la Feria de Peal de Becerro. “Llevo seis operaciones y más de ochenta puntos. Los médicos no me dan seguridad de que pueda conservar la pierna. Dicen que casi no tengo riego en el pie. El animal me arrancó la tibia, que se me salió de la rodilla. Presionó las venas hasta dejarlas inutilizadas. De las tres que hay, solo me funciona una, que es en la que me hicieron un bypass”, relata José Manuel Soto.

Este banderillero toreó en Peal de Becerro en la cuadrilla del novillero de Jódar Adrián de Paula en un cartel en el que estaban anunciados también el rejoneador Ferrer Martín y el novillero Antonio Jesús Gómez. José Manuel Soto lidió el eral que le correspondió sin problema alguno. En cambio, cuando fue a “echarle un capote” a un compañero —le correspondía cortar en el tercio de banderillas— el novillo se le quedó debajo del engaño y lo lanzó contra las tablas dándole una enorme paliza. “Me llevaron al ambulatorio de Peal de Becerro para hacerme las primeras curas. Yo veía que no me respondía el pie y que tenía un dolor tremendo. He tenido otras lesiones, pero la sensación era de que se me iba a caer la pierna. Luego, en Úbeda me hicieron una radiografía y vieron que tenía el hueso partido. Sin embargo, el dolor que tenía no era de una rotura. Pasé al Hospital Neurotraumatológico de Jaén, donde constataron que tenía un problema vascular. De allí fui al Médico-Quirúrgico. Me han realizado un cateterismo y han visto que casi no tengo riego sanguíneo en el pie. Por eso, puede que no lo recupere o que, incluso, me lo tengan que amputar”, asegura José Manuel Soto.

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