Una magistral metáfora del eterno abrazo del Abuelo

La Semana Santa 2019 ya cuenta con cartel anunciador. La obra se presentó anoche, ante un nutrido público que asistió al Teatro Darymelia, en una cita organizada por la Agrupación de Cofradías y Hermandades, y que tradicionalmente supone el pistoletazo de salida para la Cuaresma, el tiempo de preparación para la semana más importante para todos los cristianos.

Un fuerte aplauso resonó en las instalaciones cuando, tan solo minutos después de comenzar el acto, el autor, el artista cordobés Rafael de Rueda, descubrió la obra junto al hermano mayor de la cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Ricardo Cobo, y el presidente de la Agrupación de Cofradías y Hermandades, Francisco José Latorre. También eran innumerables los teléfonos móviles que se alzaban desde las butacas para inmortalizar el cartel de la celebración.

“He hecho trabajos puntuales en Jaén, y en este caso ha sido como un pequeño privilegio, puesto que mi mujer y su familia son de la tierra, por lo que tengo cierta vinculación a ella. Espero que guste mucho”, apuntó el autor, que cuenta con una gran experiencia en trabajos de diseño y restauración para cofradías de Semana Santa en las provincias de Córdoba y Sevilla. Un cartel que calificó de clásico, en el que trabaja desde el pasado otoño, cuando recibió el encargo de la agrupación jiennense, en la que la imagen de Nuestro Padres Jesús Nazareno, conocida cariñosamente como El Abuelo, es la principal protagonista, sobre su trono dorado y enmarcada por las torres de la catedral de la Asunción de la Virgen de Jaén.

La fidelidad de la imagen en los trazos, y su presentación como el centro de la devoción son algunos de los aspectos que destacan de la obra. “Solo había una condición, y es que fuera Jesús y Jaén, la capital del Santo Rostro y el Nazareno de los Descalzos”, manifestó Ricardo Cobo, que guió el acto. Al tiempo que destacó: “El cartel es una joya como obra, de una calidad excepcional, imaginativa y creativa en cuando al simbolismo y las alegorías, pero sin perder la esencia de lo que representa. Diría que de los más bonitos”, manifestó.

De esta forma, recordó, todavía “entre villancicos y melenchones” llega el cartel de forma prematura, “capricho del tiempo”. Y mientras tanto, apuntó, la ciudad se prepara para convertirse en breve en la Palestina del primer siglo y, de nuevo, para vivir la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús. Muestra de ello es el incremento en la actividad de las cofradías de la ciudad, que con sus igualás, charlas y ensayos están inmersas en los preparativos para una nueva Semana de Pasión.