Úrsula Colmenero, de la Cofradía de la Virgen de la Capilla: “La Virgen me ha dado siempre mucho más de lo que yo le he pedido”

La hermana mayor afronta su último año al frente de la hermandad orgullosa de los pasos dados hacia un mayor dinamismo y caridad

26 abr 2024 / 17:30 H.
Ver comentarios

LA ENTREVISTA

Úrsula Colmenero Domingo, hermana mayor de la Cofradía de la Virgen de la Capilla de Jaén, afronta su último año al frente de la agrupación y se muestra orgullosa de los pasos dados hacia una hermandad más activa y dinámica, volcada en la caridad.

—¿Cómo está viviendo la cofradía este tiempo de Gloria?

—Muy emocionados, sobre todo yo que es mi último año. Poniéndole todo el cariño que puedo a la Santísima Virgen. Trabajando muchísimo porque nosotros tenemos cruces de mayo, tenemos el mes de las flores, la novena, el rosario de San Bernabé, la procesión... Estamos muy activos durante todo el mes de mayo. Lo que más siento es la emoción.

—¿Qué actos suelen registrar más afluencia?

—Son todas en general, porque en San Ildefonso al estar la Virgen todas las semanas con manto distinto, con las flores diferentes, acude muchísima gente a rezar el rosario. También acuden todas las instituciones civiles, militares y religiosas a presentarse ante Ella. Luego cada una es distinta. La novena, la misa de cabildos o la procesión son muy solemnes. Y después otras más lúdicas, como las cruces de mayo. A ver si podemos sacar un poco de dinero para invertirlo en caridad, que es para lo que nosotros fundamentalmente estamos.

—¿Cómo ha evolucionado el número de cofrades?

—Es verdad que se han fallecido muchísimos cofrades, pero también hemos ido haciendo nuevos, por lo que ahora no notamos tanta diferencia. Sí que se notó en tiempo de pandemia, en el que no se pudo cobrar los recibos. Tenemos muchos recibos en mano, y no era momento de que fuera el cobrador a casa de nadie. Estuvo un poco más parado, pero ahora mismo está bien. Lo que sí pasa muchas veces es que si fallece un abuelo de familia, cae mucha gente detrás. Te pongo un ejemplo. En casa somos mi marido y yo, mis hijos, mis tres nueras y mis once nietos, y todo lo pagamos el abuelo y yo. Fíjate los recibos que salen de esta casa. Pues así hay muchos, porque era una costumbre hacer cofrades de la patrona de Jaén a los niños cuando nacen.

—¿Cómo ve a los jóvenes?

—A la gente joven la veo muy animada, porque se están implicando muchísimo. Los más pequeños también, de ocho o diez años, no sabes cómo quieren a la Virgen. Niños y niñas participan muchísimo. Me voy muy contenta porque he visto crecer muchísimo al Grupo Joven, y eso es lo que hace falta, que entre gente joven, con buena cabeza, sensatos y sabiendo en lo que estamos. Pidiendo siempre a la Santísima Virgen María que vele por nosotros y por la gente joven sobre todo.

—¿Qué balance hace de sus años al frente de la Cofradía?

—Creo que soy sincera si digo que, como mujer, he intentado ordenar todo. Hemos organizado la Casa Museo, la Casa de Hermandad, el toque que tiene una mujer. Mi objetivo espiritual siempre ha sido crear mucha devoción a la patrona de Jaén. Para ello hemos realizado muchas actividades, implicando a la gente joven, enseñándolos. También cuidando a la Santísima Virgen. He restaurado mantos, he sacado dinero de donde no teníamos. Y creo que se ha quedado la Cofradía muy decente y me siento orgullosa. Es algo que yo le he querido dar a la Virgen, pero ella me ha dado siempre mucho más de lo que yo le he pedido.

—¿Se ha sentido apoyada estos años por la Agrupación y el resto de Cofradías?

—Como vicepresidenta además de la Agrupación, sí me he sentido arropada y hemos empujado por darle su sitio a las cofradías de Gloria, aunque todos sabemos que las de Pasión están más arraigadas en Jaén. Poco a poco vamos cogiéndolo, nos vamos haciendo fuertes y se dan cuenta de que las glorias deben tener su momento.

—¿Cómo valora que la patrona haya sido incluida en la Magna del Año Jubilar?

—Cuando me lo dijo nuestro párroco, don Carmelo, me sentí muy orgullosa, porque la patrona tiene que estar. Al principio comenzaron a salir varias imágenes y yo tenía mi “pellizquillo”. Pensaba que el señor obispo contaría con Ella, al ser la patrona de Jaén, al igual que no se entendería una Magna en Sevilla sin la Virgen de los Reyes. Finalmente don Sebastián y todos los que le han rodeado han tenido mucho acierto, y yo he quedado muy contenta. Abrió con Nuestro Padre Jesús y cerró con la Virgen de la Capilla, patrona principal y alcaldesa mayor de la ciudad de Jaén. Que eso es algo que siempre recuerdo: la Virgen de la Capilla no es solo de San Ildefonso, es de Jaén, de todos los jiennenses.

Jaén