Zambombada de hermandad previa a la Navidad

La Navidad se siente, se huele y, sobre todo, se oye. Comienzan las tradicionales zambombadas y la Cofradía del Rocío celebró la suya como aperitivo a las fiestas que se vienen encima. La Casa Hermandad fue el punto de encuentro para unas ochenta personas, entre miembros, amigos, familiares e invitados. Otros años el lugar de encuentro ha sido en otros lugares, pero en esta ocasión se tomó la decisión de realizarlo en un sitio más íntimo. Desde la cofradía se mostraron “sorprendidos” y “agradecidos” por la acogida del acto, pues temían que por las fechas, con el puente de la Inmaculada de por medio, la asistencia se redujera drásticamente. Sin embargo, la respuesta fue amplia y “satisfactoria”.

A las dos de la tarde dio comienzo un encuentro lleno de momentos entrañables y divertidos. Entre plato y plato, migas camperas y embutidos, surgían los villancicos y las muestras de fraternidad que la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío busca reforzar los días previos al inicio oficial de la Navidad, donde los actos sociales se multiplican. Antonio Ángel Rodríguez, presidente de la cofradía, subrayó también el objetivo solidario del encuentro, pues la recaudación íntegra del acto fue destinada a la Asociación Provincial de Autismo y/o TGD de Jaén “Juan Martos Pérez”. Asimismo, en el acto se pusieron a la venta dulces —mantecados, magdalenas y pastas— de las monjas del convento de Santa Clara con un fin benéfico.