“Conocimos Berlín en profundidad”

Francisca López Horno y sus hijos, Blanca y Grego, viven una experiencia inolvidable en la capital alemana gracias a su fidelidad como lectores de Diario JAÉN

14 oct 2018 / 11:37 H.

Me ha venido muy bien el viaje, llegué el 20 de septiembre de Guatemala y el 26 me marché a Berlín”, confiesa Francisca López Horno, la afortunada lectora de Diario JAÉN que resultó agraciada con uno de los premios que el periódico sorteó entre todos aquellos que participaron en la elección del Popular del Año 2017 a través del envío de los cupones que las páginas del rotativo publicaron a tal fin. En el caso de esta tosiriana, enfermera de profesión, su fidelidad y empeño le valieron pasar cinco estupendos días en la capital alemana.

López Horno, que además de su trabajo en un centro de salud de Torredonjimeno es cooperante internacional con “Quesada Solidaria”, estaba recién llegada de tierras guatemaltecas, donde pasó dieciocho días, y prácticamente se bajó de un avión para subirse a otro. Entre un viaje y otro, eso sí, había muchas diferencias, y las jornadas que disfrutó en la ciudad del Muro le sirvieron como el mejor de los “relax”. Cinco días en la mejor compañía que la tosiriana guarda como un álbum en su memoria. No era la primera ocasión que visitaba la capital germana, pero asegura que sí la más enriquecedora: “La primera vez fue todo más rápido, ahora hemos podido conocer la ciudad con más profundidad”, afirma, y añade: “Ha sido fenomenal”. Y es que a la suerte de conseguir el premio se unió que Berlín, durante su visita, bullía de vida, entre otras muchas por su célebre “Fiesta de la Cerveza”, una espumosa coincidencia que enriqueció la experiencia.

Aunque el premio era para dos personas, en esta ocasión fueron tres: ella y sus dos hijos. La ocasión merecía el esfuerzo y no lo dudaron: “Nos lo pateamos todo, desde el barrio judío hasta la Catedral, incluso subimos a la cúpula”. No pararon, y su aventura berlinesa les dejó un gran sabor de boca: “El hotel era estupendo y muy céntrico”, asegura López, y a la satisfacción de alojarse en un establecimiento a su gusto se sumó una agenda repleta de propuestas: “Hicimos una caminata a pie por Berlín y descubrimos una ciudad increíble, fuimos al Muro y vimos las vallas electrificadas que separaban la ciudad, fue impresionante”, expresa. Tuvieron tiempo también de adentrarse en el campo de concentración de Sachsenhausen, del que salieron sobrecogidos: “Es otro mundo”, dice la tosiriana, que tuvo claro desde el principio que tocaba “dejar la dieta de lado” el tiempo que durase el viaje. Tan intenso fue el recorrido realizado durante los cinco días y tanta la curiosidad de la premiada que sus hijos, Blanca y Grego, le “prometieron no volver a viajar” con ella —de boquilla, claro—.

López Hornos lo tiene claro: “Nunca me esperé que me tocase a mí y, la verdad, ha sido excelente”. Sus palabras lo dicen todo, y las fotografías que testimonian su felicidad, mucho más. Para ella y los suyos, Berlín fue, gracias a su fidelidad como lectora de Diario JAÉN, la capital de la alegría.