El corazón del casco antiguo recupera todo su esplendor

Uno de los elementos más característicos de la Plaza de las Siete Esquinas, que corona el casco antiguo de la Ciudad de las Minas, vuelve a estar en su lugar. De esta manera, terminaron las obras de adecuación de la plazoleta con la recuperación de uno de los emblemas más representativos de la glorieta, la fuente de la Plaza de las Siete Esquinas, una construcción que sufrió daños, según el concejal de Infraestructuras Urbanas y Servicios, Joaquín Robles, por las malas prácticas de estacionamiento de vehículos, que, finalmente, provocaron daños en la fuente al producirse la colisión de una furgoneta con la misma. Se trata de un hecho que, en palabras de Robles, está en manos de “los servicios jurídicos del Ayuntamiento para que el seguro del vehículo pague la instalación de la fuente”, una cuantía que asciende a un total de 6.341,98 euros.

EMPRESA. Tras salir a concurso público la adquisición de una fuente que sustituyera a la damnificada, el Ayuntamiento se decantó por una empresa de Álava, en concreto se trata de “Fabricados La Nave”. Joaquín Robles destaca la labor de encontrar una compañía, ya que “hay pocas empresas” que fabriquen “este tipo de fuente”. “Al final barajamos varios presupuestos y, en función de lo que encontramos, es lo que hemos puesto”, afirma el edil de Infraestructuras Urbanas y Servicios sobre un elemento arquitectónico que considera “lo más adecuado, significativo y lo que más se parecía a lo que había anteriormente”.

Se trata de una fuente que, tal y como la anterior, mide 4 metros y tiene más de 2 de diámetro. Además, el modelo de las farolas que coronan la estructura es muy parecido a las que hay en el resto del casco antiguo de la ciudad. En definitiva, es un elemento con el que la Plaza de las Siete Esquinas recupera su particular sello.