La asociación de comerciantes necesita ayuda para subsistir

La Asociación de Comerciantes e Industriales de Linares no atraviesa por buenos momentos. Los efectos de la crisis económica hicieron mella en las arcas de la institución local, de tal manera que la tesorería de ACIL se ve notablemente resentida desde los últimos tiempos. Por ello, la propia organización y entidades de la ciudad tratan de sumar esfuerzos para buscar soluciones que permitan dar la vuelta a este problema.

“Llevamos ya ocho años tocados, pero, eso sí, no hundidos, ni estamos acabados, pero es cierto que el tejido asociativo se mantiene con muchas dificultades porque nos cuesta mucho pagar las cuotas mensuales. Además, el tema de las subvenciones funcionaba bien, pero ahora está muy parado y eso nos ha afectado de forma importante”, apuntó el presidente, Luis Pedro Sánchez.

El hecho de que numerosos asociados hayan echado el cierre de sus establecimientos desemboca en una merma de ingresos para ACIL, algo que se ve acentuado con las dificultades que muchos negocios encuentran para hacer frente a las mensualidades de la asociación. Debido a esto, la organización decidió informar de su situación a sus socios, así como a los representantes políticos.

“Lo que no funciona es la tesorería porque cuesta cobrar las cuotas de los socios, de los cuales me siento muy orgulloso porque son tiempos difíciles. Tuvimos una asamblea general y de ahí pasamos a una comisión municipal de Comercio con todos los partidos, de la que hemos encontrado buen apoyo porque han sido receptivos. Además, se está trabajando en la Mesa del Comercio en tratar de plantear ciertas soluciones para mejorar la situación”, indicó Luis Pedro Sánchez.

Algunas de las posibles medidas podrían ser aprobar una partida económica específica para ayudar al colectivo local de comerciantes e industriales o, incluso, que ACIL gestionara algún servicio a cambio de una remuneración fija. Otras posibilidades podrían ser el acondicionamiento de las calles céntricas del Centro Comercial Abierto con toldos o apostar por la peatonalización. “Las próximas semanas serán importantes porque se decidirán muchas cosas, ya que habrá otra asamblea de socios donde se expondrá una batería de medidas para que esta situación tan difícil se vuelva desahogada y positiva. Pero esto requiere de mucho trabajo y, como presidente, tengo que pelear para que salga bien, junto con mi directiva, los asociados, el equipo humano de la asociación y las instituciones”, dijo el dirigente de la organización.

Así, desde el seno de ACIL se trabaja en la preparación de las próximas iniciativas y campañas comerciales que sirvan para dinamizar este sector de la ciudad de Linares, considerado “un motor socioeconómico” de envergadura. En ese sentido, destacan la Ruta de la Tapa, plenamente consolidada, y la campaña especial de Navidad. Estos dos acontecimientos coincidirán algunos días y, además de sus programaciones habituales, también se celebrarán actividades complementarias que sirvan para hacer aún más atractivas las propuestas de venta y consumo.

“Hago un llamamiento colectivo a la reflexión para ser conscientes de que tenemos que remar en la misma dirección. Espero que la buena sintonía que existe en el comercio se mantenga y vaya a más”, agregó Sánchez, quien aprovechó para destacar el éxito alcanzado con la campaña especial Vuelta al Cole. Unos ochenta establecimientos de diversa naturaleza participaron en esta iniciativa comercial, que registró buenos datos en cuanto a participación de la ciudadanía. “Este tipo de campañas nos benefician a todos y tenemos que seguir en esa línea por el bien del comercio de la ciudad”, indicó.