Las autocaravanas no pueden estacionar en el casco urbano

Las alarmas volvieron a saltar con la instalación de una nueva señal en el solar que colinda con el edificio de la Antigua Estación de Madrid. Hace unos días, hubo una serie de quejas vecinales por el aparente cierre de un terreno que los ciudadanos utilizan, habitualmente, como aparcamiento. En esta ocasión, el letrero que luce en la entrada al descampado va dirigido a las autocaravanas, prohibiendo su acceso. Por este motivo, una ola de desacuerdo ha vuelto a hacer acto de presencia entre algunos usuarios.

Por su parte, el jefe de la Policía Local, Diego Montes, asegura: “Si se ha instalado una señal que deniega el acceso al recinto de las caravanas es porque hay una ordenanza municipal que lo prohibe”. “Lo que deben hacer los usuarios es presentar una reclamación al Ayuntamiento para que se modifique el reglamento”, asevera el responsable de la Policía Local, que considera: “Está prohibida la acampada en el casco urbano. Eso es algo que tiene que estar regulado debidamente”.

“Donde existe una norma, lo que tenemos que hacer, en verdad, es cumplirla”, asume Montes, que recalca cuál es el procedimiento a seguir para “reclamar” ante las autoridades competentes y conseguir la modificación de la ordenanza. Una vez conseguido, la Policía Local “no tendrá ningún inconveniente”. “Lo único que hacemos es cumplir las normas, no modificarlas”, subraya el jefe del cuerpo sobre un asunto pendiente de “regular”, puesto que se deben “garantizar unas condiciones higiénicas y sanitarias mínimas” para las personas que acampen en autocaravanas.

La ordenanza a la que hace referencia el responsable de la Policía Local es la relativa a la circulación en la ciudad. Así, en su cuarto título, régimen de parada y estacionamiento, refleja los casos particulares en los que queda terminantemente prohibido aparcar. Concretamente, en el cuarto punto del artículo 16 de esta ordenanza se manifiesta prohibición de estacionar “en todo el término municipal, salvo en los lugares autorizados para ello, a los vehículos especiales, maquinaria agrícola, tractocarros, maquinaria de obras o servicios, remolques y semirremolques separados del vehículo tractor, así como el estacionamiento de caravanas, autocaravanas y vehículos de similares características”. Además, el mismo documento refleja sanciones económicas que oscilan desde los 100 hasta los 200 euros de multa por incumplir la normativa vigente.

La única solución posible, ante los ojos de Diego Montes, responsable de la Policía Local, es presentar una reclamación al Ayuntamiento para que se modifique la ordenanza, ya que, desde el cuerpo, se encargan de hacer que “se cumpla la normativa”.

En esta misma línea, ya hubo una muestra de indignación por prohibir el acceso de vehículos al descampado desde el Paseo de Linarejos, hecho que el Ayuntamiento achacó a un problema de arrastre de tierra.