Se mantiene la “lucha” por los cortes en el suministro

El colectivo de pequeños agricultores que denunciaron presuntos cortes en el suministro de agua, en la zona de La Cruz, mantiene su “lucha” para tratar de hallar las soluciones que pongan fin a la problemática de la que, aseguran, son víctimas. Estos vecinos linarenses se reafirman en que son objeto de “manipulaciones”, con el propósito de ver reducido el caudal de agua que llega desde el pozo de La Unión hasta sus fincas. Una situación que pusieron en conocimiento del área de Urbanismo del Ayuntamiento de la ciudad hace casi tres semanas, pero que, según ellos, no mejora por falta de respuestas desde la Administración local.

“Parece que el Ayuntamiento no es consciente de que las plantas no entienden de burocracia y de soluciones tardías que llegan cuando el problema ya está creado. En la entrevista que tuvimos con el responsable de Urbanismo se nos dijo que buscarían una solución urgente, pero no llega. Ante la pasividad absoluta que vemos, contactamos con el Sindicato Andaluz de Trabajadores, que se ha solidarizado con nosotros”, señaló Jorge Zudaire, portavoz de los agricultores afectados.

Así, ante la próxima visita a la ciudad de Diego Cañamero, anterior representante del SAT y diputado nacional de Unidos Podemos, los agricultores de La Cruz solicitaron una entrevista con él y con el alcalde de Linares, Juan Fernández, para mantener un encuentro entre los afectados, el regidor local y el diputado, con el fin de que “tomen conciencia del problema generado con estos actos”, según indicó Zudaire, quien agregó: “Resulta inaudito que, con una sentencia firme del TSJA, que retira la concesión administrativa para captar agua del pozo por parte del residencial de La Cruz, los agricultores preexistentes sufran cortes de agua mientras que se siguen construyendo viviendas allí”.

Por su parte, el portavoz provincial del SAT, Curro Moreno, señaló, después de visitar las tres fincas afectadas por los presuntos cortes de agua: “Las plantaciones de olivar están en la ruina, con la aceituna ya seca y sin posibilidad de solución para la próxima campaña de la aceituna”. “En una injusticia, se está jugando con el pan de varias familias”, añadió el sindicalista.

El colectivo de agricultores confía en que, ante el registro de la solicitud de reunión con el alcalde, se tome conciencia desde la Administración local y devuelva las instalaciones, presuntamente saboteadas, a su estado anterior. El portavoz de este grupo de vecinos, Jorge Zudaire, recuerda que “las actuaciones de modificación empezaron en noviembre de 2015 y, desde entonces, el Ayuntamiento tiene una batería de escritos diciendo que, bajo el paraguas de una licencia de obra menor, no se puede afectar a las tuberías de conducción de agua”.

Según la versión de los agricultores, el problema viene de lejos, concretamente, cuando la promotora urbanística del nuevo residencial colindante a estas fincas no lo dotó de unas infraestructuras independientes a las preexistentes en la zona y adecuadas para la toma, acopio y distribución de estas aguas, dejando a los usuarios preexistentes o venideros colgados de la misma toma del pozo y, por tanto, de las mismas infraestructuras preexistentes.