La Policía pide al juez cerrar un pub por tráfico de droga
El local de ocio fue registrado por los agentes en una reciente operación contra el menudeo de estupefacientes
El magistrado Fernando Moral tiene sobre la mesa de su despacho del Juzgado de Instrucción número 1 de Jaén una petición muy poco común. La Policía Nacional le ha pedido que cierre de forma preventiva un pub, ubicado en pleno centro de la capital jiennense y que fue registrado la semana pasada en el marco de la bautizada como operación “Flamenco” contra el tráfico de estupefacientes. Hubo ocho detenidos que quedaron en libertad provisional. Los agentes tienen indicios de que el local estaba “activo” y abierto las 24 horas del día para servir mercancía y, también, para que se pueda consumir en su interior. Interceptaron varias llamadas entre los arrestados y algunos consumidores que así lo acreditan. En una de esas conversaciones, una persona telefoneaba a uno los implicados con la intención de comprar droga. La respuesta fue que en el pub le servían, tal y como confirman varias fuentes cercanas a la investigación. Durante el registro del negocio, los agentes hallaron dos balanzas de precisión. Por otro lado, los investigadores consideran que el establecimiento era una “pantalla” para justificar los “abultados” ingresos que tenían los sospechosos, tal y como indicó la Comisaría.
Los agentes que han trabajado durante meses en la operación “Flamenco” han solicitado al juez instructor el cierre cautelar y preventivo del pub. Será su señoría el que tenga adoptar una decisión al respecto. Algo que se espera para la próxima semana.
Hay que recordar que seis de las detenciones se practicaron en la capital jiennense, mientras que la Policía se trasladó a Granada para realizar los otros dos arrestos. Además, se practicaron tres registros en Jaén, uno en el propio local de ocio y los otros dos en sendos domicilios del Polígono del Valle. Se hallaron unos 40 gramos de sustancia estupefaciente, entre cocaína y heroína, más de 9.000 euros en metálico, diferentes joyas de oro, una pistola simulada, una escopeta del calibre 12, un machete de grandes dimensiones y abundante munición de dos calibres distintos. Presuntamente, los detenidos en Jaén viajaban casi a diario a Granada para abastecerse de mercancía.